El Gobierno elude aclarar si participará o no en la iniciativa

El anuncio del diputado general de Vizcaya, José Luis Bilbao, de ampliar el Museo Guggenheim en la zona del Urdaibai no ha dejado indiferente a nadie. Mientras la iniciativa es aplaudida desde el Ayuntamiento de Bilbao, la oposición la tacha de operación cosmética con la que se pretende reparar el deterioro sufrido por el PNV por su derrota en las elecciones generales. Y en medio, el Gobierno opta por un prudente silencio. La portavoz del Ejecutivo y consejera de Cultura, Miren Azkarate, se limitó a señalar ayer que la iniciativa de la Diputación de Vizcaya está abierta "a la participación o no" de otras instituciones.

Azkarate, quien preside la Sociedad Tenedora del museo, de la que Gobierno y Diputación son socios al 50%, confirmó que el Ejecutivo foral había reservado dinero para un proyecto, pero eludió confirmar si el tripartito está interesado en participar económicamente en él. Sí admitió que a la iniciativa foral "todavía le quedan muchas cuestiones que perfilar".

El Ayuntamiento elogia una decisión que "fortalecerá" al museo bilbaíno

La oposición reduce la propuesta a una operación cosmética

El aplauso llegó desde el Ayuntamiento de Bilbao. Andoni Aldekoa, director del gabinete del alcalde, Iñaki Azkuna, se felicitaba por la futura ampliación. "Es una noticia positiva porque, sin duda, esta ampliación va a fortalecer el impacto internacional del Museo Guggenheim Bilbao". Aldekoa ya se frota las manos pensando que contribuirá a generar un mayor ambiente y un circuito cultural más amplio en torno a Bilbao, "lo que a su vez nos permitirá aumentar la estancia media de las personas que nos visitan, que es uno de nuestros objetivos", informa Unai Larrea.

El más estrecho colaborador del alcalde rechazó que la construcción del nuevo espacio cultural vaya a restar protagonismo a la pinacoteca bilbaína. Todo lo contrario. "Será algo complementario". Su teoría es que para los visitantes potenciales la comarca de Urdaibai y Gernika son también Bilbao. "Se reforzará claramente el potencial turístico y artístico" de la capital vizcaína, confió.

Mucho más escépticos se muestran el PSE y el PP, que dudan de que la Diputación comprometa 100 millones de euros en un nuevo Guggenheim. En su opinión, se trata de un "ensayo propagandístico". El secretario general del PSE-EE de Vizcaya, José Antonio Pastor, enmarcó el plan en un intento de rebajar "la angustia por la situación electoral". Pastor resaltó que gran parte de las iniciativas que ayer anunció Bilbao para reactivar la economía, entre la que figura la ampliación del Guggengeim, estaban ya incluidas en el plan contra la crisis pactado por los tres diputados generales con el lehendakari, Juan José Ibarretxe, y que ya fue presentado la pasada semana.

En esta línea crítica, el dirigente socialista advirtió, además, de que el nuevo museo que se proyecte en Urdaibai plantea "una serie de interrogantes" sobre si es compatible ese tipo de instalaciones en una zona tan delicada en la que también hay prevista una infraestructura que contempla una viaducto soterrado bajo la ría. Insistió en que este tipo de iniciativas hay que hacerlas por consenso, con la colaboración de los agentes sociales y de los partidos políticos y "no simplemente como un ensayo propagandístico".

El PP también salió a la palestra para cuestionar la iniciativa desde varios ángulos. El apoderado popular en las Juntas Generales de Vizcaya Arturo Aldecoa, señaló primero que el nuevo museo "carece de proyecto". Después, sostuvo que la colección propia del Guggenheim resulta "escasa", con poco más de 90 obras adquiridas en 12 años.

Como tercer flanco, deslizó que ya se ha construido en la localidad de Artea un pabellón para tener depositadas obras y montajes que no se expongan habitualmente. "Luego no hay un problema de espacio que obligue ni a ampliar el Guggenheim Bilbao ni, menos, a crear un segundo Guggenheim", apuntilló.

Dos museos similares, en su opinión, no contribuyen a duplicar los turistas, pero sí a doblar los gastos. Por eso instó a que "en vez de lanzar alegremente" este tipo de propuestas sin hacer previamente los estudios necesarios y debatirlas en las Juntas Generales, la Diputación sea más prudente.

"Las declaraciones para la galería". añadió, "crean expectativas y luego pueden generar desilusiones. Además, con la experiencia de descontrol del Guggenheim, razón de más para ser prudentes y evitar proyectos desmedidos y cearsolos encubiertos", cerró en referencia al ex director financiero del museo que reconoció un desfalcó cercano a los 500.000 euros.