La huelga de autobuses se encamina a la mediación del Gobierno
El conflicto de los autobuses públicos en Bilbao y en parte de Vizcaya parece encaminado a la mediación del Gobierno. El Departamento de Empleo decidirá en los próximos días si acepta el laudo de cumplimiento obligatorio pedido por la empresa TCSA, encargada de la gestión de Bilbobus y de otras 37 líneas de Bizkaibus. Mañana está previsto que se reúna con el comité de empresa, tras el encuentro celebrado el viernes con la compañía. Luego tiene intención de mantener una reunión conjunta con ambas partes, tras la que analizará la mediación.
La huelga de 24 horas de los trabajadores prosiguió ayer, tras la primera de este tipo realizada el viernes y que dejó a Bilbao sin ningún autobús en la hora punta de la mañana. A diferencia de la víspera, ayer no hubo sabotajes y los servicios mínimos, fijados en el 30%, se cumplieron con normalidad.
El comité se muestra contrario a un laudo que resuelva el conflicto, "porque es mejor un acuerdo entre las dos partes afectadas", dijo el presidente José Antonio Fernández. Recordó que en dos ocasiones se ha dictado esta medida y que "en el año 95 el laudo fue declarado luego ilegal en una sentencia". Fernández insistió en que "le toca mover ficha" a la empresa, que dejó la mesa negociadora hace más de tres semanas.
La plantilla mantiene la convocatoria de un nuevo paro de 24 horas para mañana, en otro día laborable que se prevé conflictivo para el transporte en autobús. En los próximos días decidirán si sigue con la huelga el 4, 5 y 6 de julio.
