Una asociación de 130 transportistas de Pontevedra desconvoca el paro

Remiten los efectos sobre las industrias gallegas del paro patronal en el transporte de mercancías, del que ayer se desvinculó una de las asociaciones convocantes, Atefrimer, que agrupa a 130 empresas y 500 camiones de la provincia de Pontevedra. Pero, al mismo tiempo, se mantiene en alza el de las flotas de altura y gran altura, mientras que la de bajura podría recuperar gran parte de la normalidad a partir del lunes. El secretario general de Relacións Exteriores de la Xunta, Julio Fernández Mato, instó ayer a las autoridades europeas a articular medidas concretas de ayuda a la flota pesquera atlántica para compensar la subida en los precios del gasóleo.

Sin piquetes en las carreteras, las industrias vuelven a la normalidad

La ausencia de piquetes de transportistas en el entorno de Vigo permitió ayer una mayor actividad en las industrias de la comarca, aunque la situación no está normalizada, como se encargaron de subrayar distintas fuentes empresariales. Una caravana de 60 camiones, que circuló a media mañana por la A-55, entre O Porriño y Bouzas, ocasionó retenciones de 18 kilómetros, pero sin mayores incidentes. Los problemas de las grandes industrias para recibir componentes se detectan ya fuera de Galicia. Citroën, que reanudó ayer la actividad de sus dos líneas de producción, las parará hoy de nuevo para retomar la normalidad productiva en la noche del domingo.

La Confederación de Empresarios de Galicia recomendó a sus asociados reanudar la actividad por cuanto la Administración ha proporcionado garantías suficientes para que las empresas trabajen en condiciones de seguridad.

Santiago Tejedo, portavoz de Atefrimer, justificó su desconvocatoria del paro, acordada ayer en asamblea, en que el sector "siente que su imagen pública se ha vapuleado y demonizado". Avisó de que se acordarán nuevas protestas para las próximas semanas en función de lo que decidan otras asociaciones de las demás provincias gallegas y criticó que se produjeron "seis detenciones por cosas muy dudosas". "Vamos a seguir protestando, pero queremos que los antidisturbios se vayan de la provincia, se rebaje la tensión y que la ciudadanía no tenga que vivir en un Estado policial", añadió. Ayer fueron detenidos en Verín otros cinco miembros de un piquete por causar daños. Desde que se inició el conflicto, Guardia Civil y Policía Nacional escoltaron 1.746 camiones en Galicia.

En la flota pesquera el conflicto sigue vivo. El 30% de la flota de bajura y el 25% de la de altura y gran altura estaban ayer faenando, según datos oficiales. En el puerto de Vigo descargaron 115 toneladas de pescado once barcos (del Gran Sol, pincheros y espaderos), que se sumaron al amarre. A partir de mañana no habrá descargas ni subastas. En diez lonjas de Pontevedra y seis de A Coruña se trabajó con normalidad. En Lugo no abrió ninguna.

La flota de bajura siguió amarrada en A Coruña, donde no hubo subasta, pero volverá a la mar el lunes. La Consellería de Pesca ha convocado para ese día una reunión extraordinaria del Consello Galego de Pesca para dar cuenta del acuerdo de la Secretaría General del Mar con la Confederación Nacional de Cofradías que canaliza 19 millones de euros para subvencionar la gasolina. Pesca añade otra ayuda de 2,5 millones para las lonjas.

En el conflicto del resto de la flota, sin embargo, no se registran avances. La patronal Cepesca, convocante del amarre junto con la Plataforma en Defensa del Sector Pesquero, destacó ayer la escasa consistencia de la oferta del Gobierno para desconvocar el paro. Un estrepitoso bocinazo de media hora de los 150 barcos amarrados en distintos puntos del puerto vigués lo recordó a mediodía.