La huelga de transportistas afecta a los espectáculos

Ennio Morricone ha sido el primer artista en sufrir las consecuencias de la huelga de transportes. El compositor italiano ha suspendido sus dos concierto de este fin de semana en Madrid y Zaragoza junto al Orfeón Donostiarra. Grupos como La Fuga o el espectáculo Fama también han tenido que suspender conciertos por problemas logísticos.

"Estamos así desde el lunes", afirmaba ayer un importante promotor. "Tengo varios camiones parados en Aranjuez y he tenido que suspender varios espectáculos". Cerca de 18.000 espectadores se han citado esta noche en Las Ventas para ver la actuación de Miguel Bosé. Pero ayer el concierto estuvo todo el día en el aire. Lo mismo ocurrió con el de Pereza, que saltará al ruedo madrileño mañana. Los camiones que transportaban la estructura del escenario de ambos conciertos estaban retenidos por unos piquetes en Getafe. Las cartas de suspensión estaban redactadas cuando la Guardia Civil escoltó a los vehículos para que llegasen a su destino. Llegaron finalmente a las 21.00 y los técnicos trabajaron toda la noche.

Los dos conciertos se celebrarán, pero la huelga de transportes ha trastocado los planes de muchos músicos. Bosé tenía previsto dedicar todo el día de ayer a los ensayos que hoy se tendrán que hacer deprisa. Otros como Calamaro -que actúa este sábado en Pamplona- o Extremoduro -con casi todas las entradas vendidas en Girona o Reus- no saben todavía si podrán tocar este fin de semana. Algunas promotoras ya han pensado en contratar servicios de seguridad privada que sirvan de escolta a los camiones.

En avión

En cuanto a las artes escénicas, tanto el Centro Dramático Nacional, como la Compañía Nacional de Teatro Clásico (CNTC) y el Teatro Español, unidades de producción escénica con sede en Madrid, se encuentran desde hace días en alerta. En la CNTC se mostraban ayer preocupados, pues tienen previsto desde hoy y hasta finales de julio participar en festivales de teatro clásico.

El productor Jesús Cimarro se vio obligado ayer a meter con calzador en dos furgonetas la escenografía del espectáculo El guía del Hermitage, de Herbert Morote, ya que el transportista encargado se negó a hacerlo por miedo a los piquetes. Otras compañías han optado por mandar en avión lo básico para poner en pie sus espectáculos.