La muerte de un camionero agrava el paro de los transportistas

Tragedia en la segunda jornada de paro indefinido de los transportistas. Un camionero que participaba en un piquete en el mercado central de Granada (en el municipio de Atarfe) falleció en la tarde de ayer tras ser atropellado por una furgoneta a la que trataba de cerrar el paso. Otro integrante de un piquete murió arrollado por un camión cerca de Lisboa (Portugal), donde los transportistas también han dejado de trabajar para reclamar ayuda a los Gobiernos ante el brutal encarecimiento del combustible, el 36,8% de aumento en un año.

El fallecido en Granada se llamaba Julio Cervilla Sojo, tenía 47 años y estaba casado y con hijos. Cervilla, residente en la localidad de Peligros, trabajaba como camionero para un autónomo que únicamente dispone de un vehículo. Sobre las 17.25 se acercó a una furgoneta que intentaba descargar en un establecimiento cercano al lugar del suceso.

Otras dos personas arrolladas por un turismo resultaron heridas leves

Los kilométricos atascos obligaron a abrir peajes en la periferia de Madrid

Según algunos testigos, el miembro del piquete se había enganchado a la ventanilla de la furgoneta, su cuerpo impactó con un muro de la mediana de la carretera de Córdoba y fue arrollado después por las ruedas traseras del vehículo. La subdelegación del Gobierno aseguró en cambio que el autor del atropello (que responde a las iniciales A. Q. G.) no frenó, fue apedreado, trató de continuar su marcha y entonces arrolló al fallecido. El conductor del vehículo acudió a refugiarse a una nave próxima y fue detenido por la Guardia Civil, que realizó un fuerte despliegue ante el aumento de los transportistas allí concentrados.

El dramático suceso se conoció mientras la Comisión Nacional de Transporte por Carretera negociaba (CNTC) en el Ministerio de Fomento. Pese a la apelación de la ministra Magdalena Álvarez a los transportistas para buscar una solución "hasta la hora que hiciese falta" a un conflicto que "se está yendo de las manos", Fenadismer y Confedetrans, los convocantes del paro decidieron abandonar la mesa de negociación en "solidaridad con el compañero fallecido". Anoche, sin embargo, el Ministerio de Fomento y la CNTC llegaron a un acuerdo que contempla 54 medidas para mejorar las condiciones del sector, pero que no supone la desconvocatoria del paro, al no contar con el apoyo de los convocantes. El acuerdo no se firmó para permitir "las incorporaciones de Fenadismer y Confedetrans", dijo la ministra Magdalena Álvarez.

El giro violento que tomó ayer la protesta se reflejó también en la detención de más de una docena de personas por diversos incidentes con las fuerzas de seguridad o por coacciones a camioneros: cinco en Alicante, cuatro en Zaragoza, uno en Barcelona, dos en Guipúzcoa y otro en Granada. En el polígono de la Granadina (San Isidro, Alicante) un camión fue incendiado y un turismo atropelló a dos miembros de piquetes que resultaron heridos leves. Un joven que formaba parte de un piquete fue atropellado en La Almarcha (Cuenca) por un coche de la Guardia Civil que escoltaba a dos camiones cisterna y que le aplastó un pie.

En Portugal, el conflicto del transporte tiene las mismas raíces, similares reivindicaciones y ayer iguales tintes sangrientos. En la localidad de Alcanena, al norte de Lisboa, Manuel Agostinho, de 52 años, integrante de un piquete de huelga, murió atropellado por un camión que no atendió los requerimientos de parar efectuados por los huelguistas, informa Francesc Relea.

Un portavoz del comité de huelga confirmó a media tarde de ayer, después de una reunión de varias horas, que el paro de transportistas continuará hasta que el Gobierno se siente a negociar. La reivindicación principal de los huelguistas sigue siendo una rebaja del precio del gasóleo. "Nuestra lucha es una causa nacional", repetían los transportistas en paro.

Por lo demás, el efecto de las protestas en el segundo día de paro del transporte en España resultó similar al del lunes: bloqueos en las fronteras, retenciones kilométricas en la periferia de las grandes ciudades, cada vez menos productos en las tiendas y escolta de camiones cisterna hacia las gasolineras. La novedad fue el levantamiento de los peajes en algunas radiales de acceso a Madrid, donde más afectaron los atascos.

El municipio fronterizo de La Jonquera amaneció convertido en un gran aparcamiento. Más de 3.000 camiones atrapados en los diferentes aparcamientos del pueblo, en los peajes, áreas de servicio e incluso carriles de la autopista, informa Natalia Iglesias.

Entre los más afectados, un grupo de camioneros polacos cargados con toneladas de carne de vacuno que se están echando a perder. "Ya empieza a oler mal y tendré que tirarla", se lamentaba uno de los trabajadores.

Hubo paro total en el puerto de Valencia y en el de Barcelona los estibadores sólo cargaron y descargaron la mercancía llegada en días anteriores al paro. En Baleares los transportistas no secundan la huelga pero los efectos indirectos de la protesta continental comenzarán a notarse, entre hoy y mañana, por la posible escasez de algunos productos frescos y perecederos en tiendas y supermercados, informa Andreu Manresa.

En Vizcaya, la Ertzaintza prohibió por la mañana una manifestación organizada por la plataforma Euskadi para evitar el caos circulatorio en la autopista A-8. Ante el bloqueo, los convocantes se manifestaron a pie.