Las disculpas del alcalde de Getxo no consuelan a los vecinos afectados

El día siguiente a las inundaciones que afectaron principalmente a Vizcaya fue de balance de daños, pero también de indignación en Getxo, cuyos vecinos no fueron avisados con antelación por las autoridades.

INDIGNACIÓN VECINAL El alcalde pide disculpas

"Si la situación no era grave, ¿qué hacía el alcalde a las dos de la mañana mojándose en la calle?". Vecinos de la zona de Fadura rezumaban ayer indignación porque nadie les advirtió de la que les venía encima. "Hasta las 7.30 de la mañana [del domingo] los policías municipales no nos avisaron", aseguraron tras mantener ayer una reunión con el fin de organizarse para reclamar ayudas por los daños. El alcalde de Getxo, Imanol Landa (PNV), reconoció que el sistema de comunicación de la alerta, que se realizó principalmente a través de la megafonía de los vehículos de la Policía Municipal, no fue suficiente. Landa pidió disculpas y aseguró que toma nota para posteriores actuaciones.

VECINOS DAMNIFICADOS "A luchar con el seguro"

Frente al polideportivo de Fadura, Alejandra Azkona se afanaba en limpiar su pequeño piso. Es el número 55-B de la Avenida de los Chopos, una lonja (fue una tienda de deportes) reconvertida en una vivienda hace cuatro años que sufrió especialmente la riada. A ras de suelo, el agua entró sin oposición. "A nosotros nos pilló fuera", dice Alejandra, que no reside allí porque estaba equipando el piso. "Teníamos casi todo montado para empezar a vivir, y ahora, a luchar con los seguros. Pero no nos pagarán todo lo que hemos perdido: armarios, todos los electrodomésticos...". A pocos metros, los empleados de Drägger, una oficina dedicada a la venta de equipos de electromedicina y protección, han dejado fuera una decena de sillas ya inservibles y un montón de documentos mojados. "Estamos esperando al perito. Ya ves, el suelo de moqueta, las paredes de pladur... Todo hay que cambiarlo", se resigna Iñaki Jiménez, que salvó su ordenador porque se lo llevó a su casa. Su compañero lo guardó en el cajón de la mesa y ahora es un trasto inservible. "Tendremos que buscar otro local porque esto no va a estar bien hasta dentro de dos meses. Y la empresa no nos va a dar vacaciones".

POLIDEPORTIVO DE FADURA Sin luz y con barro

Además de viviendas, lonjas y garajes, la instalación pública más afectada en Getxo fue el polideportivo municipal de Fadura, situado justo al lado del río Gobelas. En las pistas exteriores el agua superó el metro y medio de altura. A media tarde de ayer, todavía permanecía sin electricidad, lo que impidió acceder a los vestuarios, donde se intuía lodo en el suelo. "Se han mojado los ordenadores, pero lo peor son las calderas de gas y las depuradoras", afirmaba José Antonio Gallego, uno de los empleados. Al carecer de línea telefónica, el goteo de usuarios preguntando por la reapertura era constante. "Dos días tenemos de limpieza, y luego, en función de cómo se arregle lo de las calderas y depuradoras", respondía Gallego. Como reflejo de la fuerza de la riada está el aspecto del salón de actos: la madera del suelo se ha levantado casi medio metro y en las esquinas incluso el agua ha arrancado losetas de cemento sobre las que se asentaba el parqué. La piscina principal estaba aún cubierta de lodo y en la pista polideportiva, tras haberla fregado por seis veces, aún no había desaparecido el barro.

SEGUROS E INDEMNIZACIONES Consejos para afectados

La organización vasca de consumidores EKA/OCUV aconseja a los afectados realizar un inventario lo más detallado posible de todos los daños, incluyendo los gastos colaterales por hospedaje o alquiler de vehículo, para presentarlo cuando proceda a las compañías de seguros y entidades responsables. EKA/OCUV sugiere obtener documentos gráficos (fotografías o vídeos) de los desperfectos; recoger toda la documentación posible (facturas y notas de compra) de los enseres y bienes afectados; y localizar y leer con detalle las pólizas de seguros contratadas. Asimismo, recomienda a los afectados acudir, con estos documentos, a las oficinas habilitadas por los ayuntamientos afectados y a las compañías de seguros. Sólo en Trapagarán se recibieron hasta las dos de la tarde de ayer 44 reclamaciones de vecinos que sufrieron destrozos en sus vehículos o viviendas. El consistorio medita solicitar la declaración de zona catastrófica.

DE 2.5000 a 15.000 euros Ayuda del Gobierno central

La delegación del Gobierno en el País Vasco recordó ayer que el Ejecutivo central prevé ayudas para casos de emergencia como los del fin semana. Las ayudas se conceden a través de la Dirección General de Protección Civil del Ministerio de Interior y, en su caso, a través del Consorcio de Compensación de Seguros, dependiente del Ministerio de Economía y Hacienda. Las cuantías no podrán sobrepasar los 15.120 euros en el caso de destrucción total de la vivienda habitual, los 10.320 euros por daños que afecten a la estructura de la vivienda, los 5.160 euros en el caso de desperfectos que no afectan a la estructura de la casa, los 2.580 euros por daños en enseres domésticos y los 8.000 euros por desperfectos en elementos comunes de la comunidad de propietarios.

Por otro lado, la Diputación de Vizcaya y el Gobierno Vasco estudiarán, en sus reuniones semanales de hoy, la adopción de medidas para paliar los daños.

CONCLUYE LA PREALERTA Los pantanos, en orden

La bajada de nivel del río Zadorra, que pasó de los 2,27 metros de altura del domingo a los 1,67 de ayer, dio por concluida la situación de prealerta en las zonas próximas a los embalses alaveses. El pantano de Ullíbarri continuaba ayer desembalsando 33 metros cúbicos por segundo, mientras que en Urrunaga Iberdrola estaba turbinando 30 metros cúbicos.

EL NERVIÓN, 4,6 METROS Los ríos, en máximos

El área de Hidrología del departamento de Medio Ambiente de la Diputación de Vizcaya señaló que si no se revivieron las catastróficas inundaciones de 1983 fue gracias a que la marea no fue muy alta, a que no coincidieron las puntas de marea y la onda de avenida del Nervión-Ibaizabal y a que en el momento más problemático, entre las tres y las cuatro de la tarde, dejó de llover. Varios ríos vizcaínos alcanzaron el domingo su máximo caudal en los últimos veinte años. El Butrón estuvo a punto de desbordarse en Mungia, donde alcanzó los 6,26 metros de altura. El río Asua se desbordó en Sondika e inundó el polígono industrial de Sangroniz con un caudal que, en algunos puntos, registró 4,22 metros. El Cadagua alcanzó en Balmaseda 2,49 metros de caudal. En Sodupe, el agua llegó a 3,03 metros. El Nervión se desbordó en Ariz (Basauri) y en Bilbao registró un caudal de 4,6 metros a su paso por la estación de La Peña, la máxima altura detectada en los veinte años de funcionamiento de la estación. En Deusto, sólo el domingo cayeron 104 litros por metro cuadrado, cuando la media de precipitaciones en Bilbao a lo largo de un año es de 1.000.

LA N-634, AFECTADA 200 clientes aún sin luz

Unos doscientos clientes de Iberdrola de Getxo continuaban a media tarde de ayer sin suministro eléctrico. Donde sí se restableció el servicio, a las 10.00 horas, fue en la Margen Izquierda, donde 30.000 domicilios quedaron sin luz el domingo. Asimismo, la Diputación de Vizcaya tenía a media tarde de ayer pendientes de resolver 29 incidencias en las carreteras vizcaínas. La principal vía afectada es la N-634 entre Etxebarri y Bolueta. Los dos carriles de acceso a la capital permanecerán cortados una semana por el desprendimiento de la ladera. Un carril del sentido contrario ha sido habilitado, lo que dificulta la circulación.

ESCOLARES SIN CLASE Cinco centros cerrados

Cinco centros escolares, tres en Getxo y dos más en Barakaldo, permanecieron cerrados en la jornada de ayer. En Getxo, se trató del colegio Larrañazubi, la ikastola Gobela y el instituto Getxo 1, todos ellos ubicados al lado del río Gobelas que causó las inundaciones en el municipio. Pedro Miguel Gómez, director del primer centro escolar, al que cada día acuden 200 alumnos, aseguró que no veía posibilidades de que las clases se reanudasen antes de mañana. En Barakaldo, una situación similar se vive en la escuela infantil de Arteagabeitia, que "tardará varios días" en abrir, dijeron sus responsables. El otro centro que no abrió en la localidad barakaldesa fue el colegio público de Zuazo.