Los armadores inician el amarre de la flota que dejará a España sin pescado

Los armadores gallegos han iniciado ya, de hecho, el amarre de la flota en lo que será el paro indefinido de todas las empresas pesqueras a partir del próximo viernes. Los barcos que regresan de caladeros internacionales ya quedarán en tierra y los boniteros de la costa lucense ya han optado por no iniciar la campaña de esta semana. El objetivo es que toda la flota de altura española permanezca amarrada a los puertos desde el 16 de junio en una protesta sin precedentes que pretende dejar al mercado español sin pescado. La protesta arrancará el viernes, con una manifestación ante el Ministerio de Medio Marino en Madrid.

El Ministerio de Medio Marino no prevé dar nuevas ayudas a la pesca

Los empresarios pesqueros solicitan un paquete de medidas que costará en torno a 400 millones de euros al Gobierno central y que incluye subvencionar más de la mitad del precio del gasóleo, eliminar las cotizaciones a la Seguridad Social hasta fin de año, exonerar a la pesca de las tarifas portuarias durante seis meses o financiar con 160 millones de euros el desguace de 142 barcos de altura.

"Pocas empresas pesqueras, hoy en día, no tienen pérdidas", explica Javier Garat, secretario general de Cepesca, la gran patronal pesquera española que agrupa a 1.400 empresas con 1.600 barcos. El argumento de los armadores es económico: "El gasóleo ha subido un 320% en cinco años y ya representa el 60% de nuestros gastos de explotación, mientras que el pescado nos lo compran al mismo precio en lonja. Eso ha hecho que las empresas se sobreendeudaran y ahora la situación es límite", expone Garat, quien afirma que si el Gobierno no respalda ahora al sector la pesca corre el peligro de desaparecer de España.

El Ministerio de Medio Ambiente, Rural y Marino, que dirige la socialista gallega Elena Espinosa, afirma que lo único que pueden hacer "es mediar ante las petroleras para que bajen sus márgenes para los buques". Una portavoz del citado ministerio informó de que llevan cuatro años "ayudando más que nunca al sector" con subvenciones de 30.000 euros por empresa, el pago de intereses de los préstamos o la reducción de la cotización a la Seguridad Social por enfermedades.

"Este nunca ha sido un ministerio cerrado y siempre estamos abiertos a dialogar con el sector. Se manifestarán, amarrarán la flota..., están en su derecho, pero la ministra lo que dice lo hace", explicó la portavoz de Medio Marino.

El grueso del sector, tanto en barcos, como en marineros como en facturación está en Galicia, con un peso superior al 60% del sector pesquero español y el primero de Europa en peces capturados para el consumo humano. Las principales patronales pesqueras gallegas se han puesto de acuerdo en declarar la guerra a lo que califican de "pasividad y tomadura de pelo del Gobierno". "El 15 de abril, Cepesca pidió una entrevista con Elena Espinosa para abordar el asunto a fondo y ni siquiera nos ha contestado", indica un portavoz gallego de la patronal pesquera.

Si todas las empresas pesqueras, tanto de altura como de bajura y marisqueo, están respaldando el paro y amarre de flota, los armadores aún no han logrado el apoyo de los sindicatos del mar. Los representantes de los trabajadores no están de acuerdo con algunas de las soluciones propuestas por sus patronos y afirman que ellos mismos son los que se han buscado la ruina.

Si el sector se moviliza al completo, entre el viernes próximo y el 16 de junio, dejarían de pescar 5.272 barcos en Galicia, de los que 273 son de altura y gran altura. El paro afectará a 27.400 trabajadores directos, a los que se sumarán las plantas de elaboración de alimentos de pescado que quedarían sin suministro de materia prima.

Los cálculos empresariales estiman que si el amarre de la flota se lleva adelante, dejarán de descargarse unas 800 toneladas diarias de pescados y mariscos en Galicia.