La Fiscalía de Cádiz aumenta la vigilancia del Guadalquivir

La Fiscalía de Cádiz y los cuerpos de seguridad del Estado están de acuerdo en que el bajo Guadalquivir se ha convertido en un punto principal de entrada de droga en España. El Ministerio Público ya se ha reunido con Guardia Civil, Policía Nacional y Vigilancia Aduanera para investigar el porqué de este movimiento del narcotráfico y tratar de poner coto a la gran cantidad de droga que se cree que sigue escapando del control que se realiza en la zona. "Vamos a volcarnos para evitar la sensación de impunidad", explica la fiscal jefe, Ángeles Ayuso.

Según datos aportados por Vigilancia Aduanera, el 90% de los alijos incautados en lo que va de año entró por el Guadalquivir. Las coordinadoras antidroga, con cifras facilitadas por este mismo organismo, denunciaron que sólo se interviene una cuarta parte de la droga que realmente está entrando por esta zona. Es decir, que el 75% consigue llegar a su destino. Diversas fuentes policiales explicaron que, aunque las medidas de vigilancia se han incrementado y en ese lugar opera el Sistema Integral de Vigilancia Exterior de la Guardia Civil, el control se hace especialmente difícil debido a la gran cantidad de recovecos y zonas muertas existentes, que se escapan del control de los radares. Las mafias utilizan también embarcaciones de reducido tamaño capaces de burlar los controles tecnológicos.

Los denunciantes califican de "burdas y claras" las manipulaciones

Con estos datos sobre la mesa, se han reunido la Fiscalía y representantes de los diferentes cuerpos policiales. No quieren dar demasiadas pistas a los delincuentes pero una de las conclusiones principales es la necesidad de reforzar determinadas zonas, como el Guadalquivir.

A la espera de conocer el detalle de la memoria anual de la Fiscalía antidroga, su titular, Ana Villágomez, ya ha avanzado que, durante el año pasado se han incrementado considerablemente las intervenciones. "Se ha detectado un aumento global de la droga incautada y también de las cantidades que se llevan en cada cargamento. Ha habido alijos de 1.000 kilos, 1.800 e incluso de 3.000", adelantó la fiscal.

Entre las razones de este incremento, el Ministerio Público recuerda que la respuesta penal no difiere mucho por trasladar 500 kilos o el doble, por lo que, las mafias tratan de sacar el máximo provecho a cada viaje.