Egibar desafía la autoridad de Urkullu
El PNV guipuzcoano censura el apoyo a la moción contra ANV en Mondragón - La asamblea considera "nefasta" la actuación de la ejecutiva nacional
Joseba Egibar, presidente del PNV en Guipúzcoa, mantiene vivo el pulso con la dirección de su partido que encabeza Iñigo Urkullu, que la pasada semana le obligó a rectificar su decisión inicial de no apoyar la moción de censura contra ANV en Mondragón por no condenar el asesinato de un ex edil socialista.
Lejos de rebajar la tensión interna, que parecía enterrada tras el acuerdo entre los dos sectores del partido para aupar a Urkullu como presidente en diciembre pasado, ahora le plantea un nuevo desafío a su autoridad. El dirigente guipuzcoano, que encabeza la corriente soberanista del PNV apoyada por el lehendakari frente a la que se orienta más a un pacto con los socialistas, no se da por vencido: en la noche del viernes admitió ante la asamblea regional extraordinaria que acatará la decisión de presentar la moción de censura, pero logró el apoyo incondicional de ese órgano para aprobar una crítica sin paliativos -"una queja por su forma de proceder"- a la dirección de Urkullu.
Este nuevo desaire pone de manifiesto tanto el estilo de dirección de Egibar como su intención de hacerse fuerte en un territorio en el que apenas ha dejado oposición y de plantar cara con esa base de poder, pese a encontrarse en minoría en el EBB: controla cinco puestos frente a siete, uno más que en el anterior mandato de Josu Jon Imaz. Con la firmeza con que suele defender sus posiciones, Egibar, quien tuvo que comparecer junto con Urkullu para hacer visible el cambio de opinión del partido sobre Mondragón, responde exhibiendo sus apoyos a esa rectificación pública.
La asamblea adoptó el viernes una doble censura casi sin precedentes en el PNV, tanto en el ámbito regional como en el nacional, que contribuirá a aumentar la crispación en las filas peneuvistas, elevada tras los malos resultados electorales del 9-M, particularmente en Guipúzcoa.
La asamblea no se limitó a instar a dejar el partido al ex diputado general, Joxe Joan González de Txabarri, obligado por el propio Egibar a no repertir en el cargo, y a los tres responsables de Hacienda en su mandato por filtrar los datos fiscales de Jon Jauregi, como ya trascendió ayer. Además, aprobó un tetxo que critica con dureza la rectificación impuesta a Egibar. El texto fue planteado por la junta municipal del Antiguo, en San Sebastián, la más numerosa de Guipúzoca y a la que precisamente pertenece Egibar.
Pese a esta discrepancia pública que trasladarán a la asamblea nacional, el presidente provincial comunicó a la militancia que "se acatará" la decisión del EBB y, consecuentemente, respaldará las mociones de censura en Mondragón y las posibles en otros ayuntamientos de ANV.
El texto aprobado subraya que no puede haber "una actuación más nefasta" que la que ha tenido el partido en este caso. Además de quejarse de los mensajes "contradictorios" del partido, manifiesta el "malestar" por la rectificación a Egibar, que ha introducido "más confusionismo" en su electorado. Y los fieles al presidente guipuzcoano lanzan una clara advertencia sobre la aproximación al PSOE, al deplorar los "pactos políticos que no van a tener más resultado que la pérdida de posiciones políticas en Euskadi". Así consideran, "absolutamente necesario contrarrestar" la "campaña de acoso político-mediático" que están llevando a cabo los socialistas "contra el PNV, el Gobierno vasco y el lehendakari".
Egibar se embarca así en una nueva batalla. Hace poco tuvo que renunciar a formar un bloque soberanista para concurrir a las pasadas generales y ahora tiene que dar marcha atrás en Mondragón. Pero en su territorio sus decisiones son órdenes y las defiende a capa y espada, como se ha visto en el caso Jauregi, una muestra precisamente de cómo las divisiones entre Egibar y los anteriores mandatarios fieles a la línea de Imaz están haciendo aflorar polémicas en la formación.
El texto aprobado
- "(...) La base del partido y nuestro electorado se encuentra con diferentes mensajes, según quién sea el mensajero. El último ejemplo lo hemos tenido con el asunto de Arrasate. A nuestro entender no se puede tener una actuación más nefasta".
- "1.- En la última asamblea regional (...), el presidente del GBB manifiesta que el partido no puede seguir la estrategia de los socialistas y entrar a solucionar los problemas que ellos mismos propiciaron a base de presentar mociones de censura. Esta posición, conocida por el EBB, fue la que se llevó a la reunión de todos los partidos".
- "2.- Al día siguiente, el presidente del EBB (...) presenta la postura de este órgano de dirección, que (...) contradice la que presenta el GBB".
- "3.- [Compartimos] no aceptar la moción de censura. No nos parece prudente actuar a través de acciones de este tipo que a la larga nos llevaría a conflictos continuados (...)".
- "4.- [Trasladamos] la queja al EBB por la forma de proceder ante esta situación. (...) Así creemos que lo entiende la mayoría de nuestro electorado sobre pactos que no van a tener más resultado que la pérdida de posiciones políticas".
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