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Tres sindicatos intentan parar hoy el Puerto de Bilbao contra la privatización de tareas

Tres sindicatos (ELA, UGT y CCOO) intentarán hoy poner a la Autoridad Portuaria de Bilbao contra las cuerdas para evitar la privatización de su Sociedad de Estiba y Desestiba, responsable del porte del cargamento. Las centrales han convocado una huelga en el Puerto bilbaíno y se concentraran en portesta frente a la sede de la Autoridad Portuaria. El sindicato mayoritario en el sector, la Coordinadora Estatal de Trabajadores del Mar no apoya la huelga.

Las centrales tienen previsto trasladarse a mediodía hasta la sede de la Autoridad Portuaria, lugar y momento en el que el Estado dejará de ser el accionista de referencia de la Sociedad Estatal de Estiba y Desestiva, iniciando el proceso que la convertirá en una serie de agrupaciones portuarias de interés económico (Apies).

Un portavoz del organismo responsable de la gestión del puerto de Bilbao prefirió no dar su opinión sobre la protesta de hoy. "Lo que vamos a hacer es cumplir la ley, nada más", declaró en alusión a la creación de las Apies.

El problema surge a raíz de una ley que aprobó en 2003 el Gobierno de José María Aznar, que incluía la creación de las citadas agrupaciones en cada puerto en sustitución de las antiguas sociedades de estiba y desstiba. Tras llegar al Ejecutivo central, los socialistas intentaron derogar la ley en febrero de 2006, pero dieron marcha atrás ante la falta de apoyo parlamentario.

La situación se complicó aún más cuando la coordinadora firmó con la patronal del sector, ANESCO, un acuerdo marco que fue rechazado por ELA, UGT y CCOO y Puertos del Estado, organismo del Gobierno central competente en la materia. Poco después del acuerdo, la coordinadora inició una huelga exigiendo la privatización.

El secretario federal de ELA, Alberto Valles, defendió ayer en una rueda de prensa "el carácter público de las actividades portuarias" y afirmó que la coordinadora ha actuado "como estilete de la patronal para favorecer la privatización". También criticó que la patronal les ha amenazado con "discriminar en la entrada al puerto en función de la afiliación sindical" y con sustituir a "los huelguistas con empleados de empresas de trabajo temporal".

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Fuentes cercanas a la autoridad portuaria explicaban así el comportamiento de la coordinadora: "Puede que crean que van a ganar fuerza a la hora de negociar, antes tenían dos interlocutores [el Estado y la patronal], ahora sólo tendrán uno".

A través de un comunicado, CCOO añadió que exige también a la patronal "la adecuación de la plantilla para solucionar el grave problema de excesos de jornada" que en su opinión existe.

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