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Reportaje:

Un hervidero de mundos posibles

El Foro Social Catalán abre dos días de debate para "cambiar la lógica global"

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Este año no hay Porto Alegre (Foro Social Mundial) que se contraponga, como ocurre desde 2001, al Foro Económico de Davos, que comenzó el pasado miércoles. No hay uno, hay miles, y el de Cataluña empezó ayer, en la Facultad de Filología de la Universidad de Barcelona, para debatir durante dos días alternativas a "un sistema global que destroza muchas economías y, sobre todo, muchas vidas humanas", subrayaron miembros del Foro Social Catalán (FSC), que organiza el acto. Asistieron unas 250 personas.

"Es un espacio necesario", señaló la escritora Rosa Regàs, presente en la apertura del foro, "porque se cuentan verdades que ya se saben, pero que es necesario repetir para que calen en la gente". La actriz Vicky Peña, que también apoyó la iniciativa, destacó que es "un espacio donde poner en contacto a los ciudadanos con los problemas de la calle".

El FSC ha agrupado estos problemas en 48 ponencias y 15 talleres que, bajo el lema Otro mundo ya es posible, pretenden "abrir los ojos a otras posibilidades", apuntó un miembro de la organización.

El Foro Social Mundial, que hasta ahora había centralizado sus actividades en una misma ciudad -el año pasado fue en Nairobi, Kenia-, se ha dispersado como un racimo de asambleas para celebrarse, simultáneamente, en distintas urbes y regiones de todo el globo. Será mañana, en el Día de Acción Global, coordinado mundialmente y que pretende poner en contacto, vía Internet, las acciones que han organizado los participantes por su propia cuenta. La aportación catalana, que empezó a celebrar el Día Global ayer y lo acaba hoy, se cerrará realmente con una manifestación mañana, convocada a las 12.00 en la plaza de la Universitat.

Las ponencias de ayer fueron "un éxito", afirmaron los organizadores, y las aulas se llenaron con gente de todas las edades. La conferencia más concurrida fue la que llevaba por título ¿Por qué es necesario el descrecimiento?, que atrajo a más de 50 personas. La diversidad de público se explica por la variedad de asociaciones que han colaborado con la FSC, más de 190. El mosaico final es un conglomerado que sonrojaría a la coalición política italiana más variopinta. Desde Veterinarios sin Fronteras hasta la Asociación Catalana de Esperanto, pasando por los Maulets y el colectivo Cuca de Llum. "Nuestro espíritu es la heterogeneidad", explicó uno de los organizadores. "Puede participar cualquier entidad excepto las que defiendan la violencia y los partidos políticos". También se han sumado al foro las organizaciones Intermón, Oxfam y Greenpeace. "Abrir las puertas a todos me parece muy enriquecedor", aseguró Juana, diseñadora de 55 años que acudió al foro "por casualidad". "Ha sido una suerte, porque es un proyecto interesante", sentenció.

El año próximo, el FSM recuperará su reunión internacional en Belém, Brasil, aunque no descarta emprender otras actividades paralelas.

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