El éxtasis provoca en ratones una neurodegeneración similar al Parkinson

Investigadores del Consejo Superior de Investigaciones Científicas (CSIC) han probado que el consumo de éxtasis o MDMA en cantidades abusivas en ratones comparte los mismos mecanismos de degeneración neuronal que otras enfermedades neurodegenerativas frecuentes, como la enfermedad de Parkinson o la de Huntington.

A los ratones se les administraron 20 miligramos cada 3 horas, hasta un total de 60, explica Rosario Moratalla, que dirige el equipo de investigación del Instituto Cajal (CSIC) que ha llevado a cabo esta investigación. "La cantidad utilizada supondría el consumo abusivo de éxtasis en un corto espacio de tiempo", explica.

Las conclusiones del estudio demuestran que el éxtasis es neurotóxico e incide en los neurotransmisores de dopamina, implicados en el aprendizaje y en este efecto degenerativo. "El patrón de degeneración que provoca el éxtasis es similar a los patrones de neurodegeneración de los primeros estadios de la enfermedad de Parkinson, la de Huntington o la isquemia cerebral", afirma Moratalla. Este efecto degenerativo afecta primero a los estriomas y después a la matriz de una parte del cerebro llamada el cuerpo estriado.

"No sabemos qué ocurriría si aplicásemos estas dosis en su equivalente en humanos", afirma Moratalla. Hasta el momento, las investigaciones con humanos han demostrado que el éxtasis produce degeneración del sistema serotonérgico. También que dos de cada tres consumidores de éxtasis sufren trastornos psiquiátricos.

Alrededor de nueve millones y medio de europeos han consumido alguna vez en la vida éxtasis, lo que supone un 3 % de la población del continente, según los últimos datos del Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías correspondientes al 2007.

España está por encima de esta media europea, ya que un 4,4% de la población ha probado este estupefaciente en alguna ocasión. Tan sólo superan la media otros dos países, el Reino Unido, con un 7,2 %, y la República Checa, con un 7,1 %.