Applus escindirá una de sus ITV para reducir su peso en Cataluña

Applus se ha salido con la suya. El grupo de certificación e inspección, adquirido recientemente por Carlyle y un consorcio liderado por Caixa Catalunya, ha accedido a escindir una de sus dos ITV, tal como exigen los socios minoritarios. Éstos quieren seguir su camino en solitario aprovechando la futura ley de seguridad industrial que ultima la Generalitat para introducir más competencia en el mercado. Pero ha conseguido dos cosas: no tener que vender ninguna estación para cumplir con la normativa y asegurarse el dominio del mercado hasta cinco años más, que es justamente lo que alegó el primer tripartito para anular la concesión que CiU prorrogó antes de perder el poder.

La nueva ley, que podría debatirse en el Consell Executiu del 18 de diciembre, prevé un periodo de dos años, desde la entrada en vigor del reglamento, para que ningún operador tenga más del 60% del mercado. Y otros dos años para reducir su peso al 50%, explicó ayer el consejero delegado de Applus, Joaquim Cuello.

Fuentes de la Generalitat no esperan su aprobación hasta mediados de 2008. Esto obligará a la Generalitat a prorrogar otra vez el actual sistema de concesiones, que, en principio, debía expirar este año. La concesión ya fue alargada 18 meses por el anterior tripartito, en julio de 2006, debido a que la salida del Gobierno de ERC impidió que el Ejecutivo contara con apoyos parlamentarios suficientes para cambiar el sistema de concesiones por otro de autorizaciones.

En el mejor de los casos, Applus seguiría acaparando el mercado cinco años más, prácticamente lo que pretendía el último Gobierno de Jordi Pujol, que alargó la concesión hasta 2014. "La torpe gestión de este Gobierno le ha llevado a tomar esta decisión salomónica", criticó ayer el portavoz de CiU en el Parlament, Oriol Pujol.

Applus, que controla el 80% del mercado de las ITV en Cataluña (de 45 estaciones) entre las empresas Iteuve y ECA, se repartirá esta última con las familias Puignou y Marugan (de la que controlan el 49%), lo que supone nueve estaciones. Con esta operación, a la que Coello no puso fecha, la cuota de Applus, bajará al 60%. Como la futura ley prevé la creación de 20 estaciones más y Applus no optará a ninguna más, su participación, dentro de cinco años, quedará diluida al 50%, explicó ayer Coello.

El consejero delegado de Applus explicó el plan estratégico del grupo para los próximos cuatro años. Invertirá 450 millones para impulsar su especialización e internacionalización, "pero no diversificaremos hacia nuevos sectores", aclaró. El objetivo es duplicar el tamaño de Applus en 2011, hasta alcanzar unos ingresos de 1.200 millones de euros y un beneficio bruto operativo (Ebitda) de 220.

El máximo ejecutivo de Applus, que lleva un año al frente de la compañía, avanzó que está a punto de cerrar la compra de una ingeniería en Corea del Sur y que acudirá al próximo concurso en la Comunidad de Madrid para abrir nuevas ITV.