Líbrennos de los envases
Escuché que en el reciente encuentro de nuestro presidente con Clinton hablaron de hacer realidad las voluntades de los ciudadanos para frenar el cambio climático. Desde aquí quiero hacerles llegar una de mis voluntades al respecto: me gustaría no verme obligada a llenar una o varias bolsas de basura cada día, sólo porque no haya una ley de envases que me libere del excesivo empaquetamiento de los productos que compro a diario.
En mi casa somos tres y aunque cada día tenemos que comer fuera de casa, no nos vemos libres de llenar al menos una bolsa de basura de envases, vidrios aparte. ¿Realmente no se puede evitar esta invasión de residuos? ¿Por qué no puedo devolver los envases de vidrio para que sean reutilizados como hacía en mi infancia? ¿A quién le interesa toda esta producción de basura? Desde luego, a los seres humanos, no.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.