Merck dará 3.300 millones a los afectados del Vioxx
La compañía da carpetazo así a una demanda puesta en EE UU por 27.000 supuestos perjudicados por el fármaco
La farmacéutica Merck cerró ayer un acuerdo crucial que le permitirá dar carpetazo a casi la totalidad de las 27.000 demandas presentadas contra su antiinflamatorio Vioxx. La compañía creará a cambio un fondo de compensación dotado de 4.850 millones de dólares (3.310 millones de euros), al que sólo podrán acceder pacientes residentes en EE UU. Su tratamiento estrella contra el dolor fue retirado hace tres años del mercado en todo el mundo, por los riesgos de infarto y derrame cerebral asociados a su consumo.
El plan de la tercera farmacéutica estadounidense era afrontar este colosal litigio caso por caso, en lugar de por la vía de la demanda colectiva, la más común en este tipo de procesos judiciales en EE UU. Esta estrategia se está mostrando bastante exitosa en los tribunales para Merck, donde 5.550 demandas ya han sido rechazadas y una veintena de casos sometidos a juicio retirados incluso antes de que fuera elegido el jurado.
El medicamento se retiró hace tres años ante el riesgo de hemorragias
Merck tenía 1.900 millones en reserva para hacer frente a los cuantiosos costes del litigio, que amenazaba con prolongarse durante varios años y derrumbar las finanzas de la compañía, que está viendo cómo los medicamentos genéricos le quitan mercado. Ya se había gastado 1.200 millones. Hasta la fecha, según informa la empresa, unos 14.100 demandantes habían aceptado negociar para evitar el proceso legal, a la vista de que la farmacéutica estaba ganando buena parte de los casos.
El paquete anunciado ayer cubrirá el 95% de las 26.600 demandas en curso en el caso Vioxx. Y el coste financiero para Merck, con sede en Nueva Jersey, será 10 veces inferior a lo que Wall Street anticipó en el verano de 2005, cuando sufrió la primera derrota. También rebaja la cantidad que se pide en los casos ya admitidos a trámite, de 9.600 millones. "Estamos muy contentos con el pacto", dijo ayer Chris Seeger, uno de los seis abogados que negociaron el acuerdo. "Es una vía importante para resolver el litigio".
Los pacientes que opten al fondo de la farmacéutica deberán presentar evidencias de pruebas médicas por los daños a la salud ocasionados por el consumo de Vioxx, demostrar que consumieron al menos 30 píldoras del fármaco y que las ingirieron 14 días antes de cursar la demanda. Bruse Kuhlik, consejero general de Merck, dijo ayer que el proceso de examen de las peticiones de compensación se realizará de forma objetiva y ordenada, siguiendo un escrutinio científico riguroso.
El plan de compensaciones debe contar con el apoyo del 85% de los demandantes para entrar en vigor. Y para conseguirlo, Merck se da de plazo hasta el próximo 1 de marzo de 2008. Los pagos podrían empezar a ejecutarse en agosto de ese año, y se reserva el derecho de acudir a los tribunales si no se cumplen los requisitos antes citados. El acuerdo sólo cubre a los afectados residentes en EE UU, donde tiene su sede la compañía y están localizados el grueso de los litigios. De ese total, 2.800 millones irán a las demandas por infarto y los otro 500 para los casos que alegan derrames.
Merck anunció el 30 de septiembre de 2004 la retirada voluntaria del popular tratamiento contra el dolor, que fue consumido en EE UU por 20 millones de personas y se vendió en 80 países. Entre ellos España, donde unas 227.000 personas tomaron el fármaco. Sus ventas ascendían a los 1.750 millones. En su día se barajó que el consumo de Vioxx podría estar detrás de la muerte de unos 139.000 pacientes desde mayo de 1999.
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