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72.000 ovejas muertas en España, un 90% en Andalucía

Ginés Donaire

Las organizaciones agrarias estiman que más de 72.000 ovejas han muerto este año por la lengua azul en España. De éstas, el 90% -unas 65.000- pastaban en explotaciones andaluzas, y el 40% pertenecen a la Sierra Norte de Sevilla, donde han muerto ya más de 30.000 ovejas. Precisamente, los ganaderos de esta comarca han convocado el 13 de noviembre una concentración ante la sede de la Junta.

Prácticamente toda Andalucía queda dentro de la denominada zona sucia de lengua azul, que se extiende desde Madrid y afecta también al sur de Extremadura. La Consejería de Agricultura y Pesca ha comenzado esta semana a aplicar las vacunas -unas 500.000 dosis- frente al serotipo 1 para erradicar del territorio andaluz la fiebre catarral ovina (otro nombre de la misma enfermedad). Las dosis comenzarán a aplicarse en dos dosis, la primera del serotipo 1 y la segunda bivalente frente a los serotipos 1 y 4. La vacunación se ha iniciado en aquellas zonas restringidas limítrofes con los territorios libres para evitar la expansión de la enfermedad a otras regiones.

Ayudas públicas

Las ayudas públicas anunciadas hasta el momento por el Gobierno andaluz son de seis euros por oveja viva afectada, y los ganaderos van a ser indemnizados por las bajas sufridas en sus explotaciones con 100 euros por cabeza de res muerta. Además, la Junta ha solicitado a la Administración central otra serie de medidas fiscales que contrarresten la situación por la que atraviesan las explotaciones, como la reducción o exención de los módulos para el IRPF, la exención del IBI y un incremento del IVA compensatorio para igualarlo al agrícola. Además, se ha pedido la reducción de cuotas a la Seguridad Social para el sector ganadero y préstamos bonificados.

Sin embargo, los ganaderos consideran insuficientes esas ayudas (aseguran que las ayudas sólo dan para 15 días de pienso por oveja), demandan un plan de recuperación del sector, lamentan el olvido del sector caprino y creen que las vacunas han llegado demasiado tarde.

La lengua azul no es más que la puntilla para un sector ganadero que atraviesa una grave crisis por las subidas de hasta un 40% en los piensos dedicados a la alimentación animal, y los bajos precios percibidos por los productores, lo que ha puesto a miles de pequeñas y medianas explotaciones al borde de la desaparición. Las organizaciones agrarias Asaja, COAG y UPA se manifestarán el próximo 29 de noviembre en Madrid para exigir al Gobierno medidas que eviten el abandono masivo de las explotaciones ganaderas.

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