"Turquía tiene que reconocer el genocidio armenio"

Matanzas de niños, decapitaciones, violaciones, una castración seguida de un disparo en la cabeza... El destino de Nunik, la película de los hermanos Paolo y Vittorio Taviani que inauguró ayer el Sevilla Festival de Cine Europeo, tiene escenas de una crueldad extrema, muy difíciles de soportar para el espectador. Sin embargo, ninguna es gratuita porque todas dan cuenta del genocidio sufrido por los armenios a manos de los turcos durante la I Guerra Mundial, un episodio histórico que aún hoy causa pesar.

El horror se multiplica porque la violencia irrumpe de súbito en un cálido ambiente familiar, en un mundo de personas acomodadas y amables que ven crecer a sus hijos y aman la música y las fiestas. "Decidimos contar esta historia tremenda del genocidio sufrido por los armenios a través de la vida de una familia. La película describe en la primera parte esa cotidianeidad a la que acabamos cogiendo cariño. Sus vivencias son como las de cualquier familia. Y por eso cuando, de repente, el mundo les cae encima, la historia es tan terrible. Es como si nos pudiera ocurrir a nosotros", señala Paolo Taviani, que está estos días solo en Sevilla, puesto que su hermano y codirector se quedó en Italia debido a una gripe.

"Hubo también muchos turcos que ayudaron a los armenios"

"Paz Vega y Ángela Molina dieron todo de sí mismas en el rodaje"

El cineasta quiere, con todo, relativizar el impacto de la violencia. "Muchas de esas escenas están fuera de campo, no las ve el espectador; por ejemplo, la castración o el asesinato de niños. La escena más dura de la película es cuando dos mujeres armenias se ven obligadas a matar a un niño recién nacido. Cuando rodamos la escena, todo el equipo -los actores, cámaras, técnicos- empezó a llorar", explica la mitad de un dúo de creadores supervivientes de la era dorada del cine italiano, autores de Padre patrón, filme que obtuvo la Palma de Oro en Cannes hace 30 años.

Paolo Taviani cree que "Turquía tiene que reconocer el genocidio armenio", al igual que Alemania hizo con el judío. Taviani insiste en que las matanzas fueron llevadas a cabo por "unos determinados grupos políticos y facciones". "Hubo también muchos turcos que ayudaron a los armenios. Algunos de ellos se han sentido ofendidos por esta película y han dicho que no les queremos. No es verdad. Nosotros les decimos que no hablamos mal de los turcos, que amamos al pueblo turco y que creemos que debe estar informado del genocidio armenio", señala el director italiano.

"Turquía quiere entrar en la Unión Europea. No tenemos intención de entrometernos en los asuntos de otros Estados. Pero nosotros, como miembros de los 27, debemos pedirles que reconozcan el genocidio armenio", afirma. Con todo, El destino de Nunik, de momento, no podrá ser vista en Turquía. "Incluso el libro en el que está basada la película está prohibido en este país. Espero que llegue el día en que esta película se proyecte en sus colegios. Sé que este deseo es todavía un sueño", agrega Taviani. En El destino de Nunik se narra la historia real de la familia de Antonia Arslan, autora del libro en el que se han basado los hermanos Taviani para su película.

El filme muestra que, en determinadas situaciones, el hombre puede ser un animal muy peligroso. "Esta sensación de que el ser humano puede ser horrible la vemos cada día. Aún hoy. Y lo más desesperanzador es que no hemos aprendido nada de las lecciones del pasado. Las brutalidades que ocurren hoy en África y Oriente Próximo son las mismas de siempre", comenta.

Paz Vega encarna a Nunik, la joven armenia que se vuelca en la protección de sus hermanos cuando son deportados. "Los ojos negros de Paz Vega son cine puro. En el rodaje dio todo de sí misma. Lo mismo hizo Ángela Molina. Paz Vega, incluso, aprendió italiano. Hubo que doblarla por su acento español. Pero hizo el esfuerzo con ese idioma. Con ella ha ocurrido lo que sueña todo director: que el actor contribuya con sus aportaciones a enriquecer la película. Esto es lo que ha hecho Paz Vega con su extraordinaria interpretación", concluye.

El destino de Nunik es una coproducción de Italia, Francia, Bulgaria y España. El reparto lo completan Moritz Bleibtreu, Mohammad Bakri y Tcheky Karyo, entre otros. La película se estrenará en España el 28 de diciembre.