Cuatro minutos en el espacio

Más de 140.000 euros por cuatros minutos flotando en el espacio. Ya hay seis españoles que están dispuestos a pagarlos y han hecho la reserva para embarcarse en los primeros vuelos suborbitales que pretende lanzar la compañía Virgin en el año 2009. El primero en apuntarse fue el dueño de la popular oficina de lotería La Bruixa d'Or, Xavier Gabriel, que ya ha adelantado el pago del total del viaje para ser uno de los 100 primeros.

"Seré el primer turista espacial español. Estar allí, con gravedad cero, al lado de la Tierra... una experiencia así emociona a cualquiera", explica el lotero de Sort, un amante de la aviación que ha decidido lanzar una compañía de vuelos privados.

Otra turista galáctica es Ana Bru, directora además de la agencia de viajes selectos Bru & Bru, la única oficialmente autorizada por Virgin, la compañía del multimillonario Richard Branson, para comercializar en España los viajes suborbitales. Bru asegura que la aventura comienza en el momento en que el viajero asume que viajar al espacio, "no dura sólo cuatro minutos".

La agencia Bru & Bru ya ha empezado a recibir las primeras consultas de clientes interesados por esta aventura. Acreditar que se goza de buena salud, superar las pruebas en gravedad cero -el lotero de Sort advierte de que "los fumadores pueden tener dificultades"- y tener el dinero suficiente son los únicos requisitos para viajar al espacio.

El alpinista vasco Iosu Feijóo también viajará al espacio y ha negociado ayudas públicas para ello, según explica Gabriel. Entre despegue y aterrizaje transcurren dos horas y media, con cuatro minutos en el espacio.

En total, Virgin ya ha hecho tres vuelos de prueba y dice tener una lista de 200 viajeros en todo el mundo esperando a tomar ese vuelo que pretende partir del desierto de Mojave (California) en 2009, aunque el nuevo Spaceport America en Nuevo México, el primer aeropuerto espacial comercial del mundo, diseñado por Norman Foster, se convertiría en la base de operaciones de la compañía para 2010. El precio del viaje es único, 200.000 dólares (140.479 euros), independientemente del país o agencia. Virgin invertirá 50 millones de euros en cuatro aeronaves, todavía sin construir, y el aeropuerto. Comenzará con un vuelo semanal, pero espera alcanzar dos diarios.