Obligadas a cumplir
Un decreto exige a la Universidad rendir cuentas del resultado de cada carrera
Los alumnos universitarios deben aprender y, si no lo demuestran al rendir cuentas a final de curso, suspenden. Así de sencillo. Pero los gestores de la universidad y los profesores también tienen una responsabilidad fundamental en ese juego. "Si un profesor sólo aprueba cada año a dos alumnos, alguna culpa tendrá también él", se queja Concha Espinosa, secretaria de la sección universitaria de UGT.