El Gobierno reduce un 25% los derechos de las industrias a emitir CO2

El camino marcado por el Ministerio de Medio Ambiente para que Galicia ayude a frenar el calentamiento del planeta pasa por que las industrias del país reduzcan en un 25% el CO2 que escupen por sus chimeneas. El departamento de Cristina Narbona propone esta rebaja de los derechos de emisión que otorgará a las empresas gallegas hasta 2012. La Xunta aplaude el recorte para luchar contra el cambio climático. A los ecologistas les parece insuficiente.

En su asignación provisional de derechos de emisión de

CO2, el Gobierno otorga a las industrias gallegas una cuota que ronda los 53 millones de toneladas para un lustro. Esta concesión de más de 10 millones de toneladas por año supone una rebaja del 25% con respecto a las 13 del periodo 2005-2007, aunque el recorte no es igual para todas las empresas.

El agotamiento del lignito pardo en la mina de As Pontes, un mineral muy contaminante, ha llevado al ministerio a rebajar el cupo de la central térmica de carbón de Endesa casi a la mitad hasta 2012. La instalación, que absorbe 22 de los 53 millones de toneladas asignadas gratuitamente a toda Galicia y que en España sólo es superada por la siderúrgica asturiana Arcelor, recortará sus emisiones de CO2 un 27% el año que viene y un 40% en los ejercicios posteriores.

Greenpeace, Ecologistas en Acción y Verdegaia consideran que esta rebaja es insuficiente y que el sistema de reparto resulta "enormemente favorable" a las centrales de carbón frente a las que usan gas, sin tener en cuenta que las primeras son las que más contribuyen a calentar el planeta. Así, la central de carbón de As Pontes tiene derecho a emitir gratuitamente más de 22 millones de toneladas de CO2, mientras que la de ciclo combinado con gas sólo podrá soltar tres. El plan del ministerio, sostienen los colectivos ambientales, convierte al carbón en el combustible "más atractivo económicamente" para las empresas eléctricas y "desincentiva" las inversiones en energías renovables.

Entre las empresas gallegas a las que el Gobierno otorga más derechos gratuitos de emisión de

CO2 -las industrias pueden superar después el límite asignado comprando parte de la cuota que otras firmas no gastan- se encuentra una fábrica de biocombustibles. Bioetanol Galicia, la planta de Curtis participada y subvencionada por la Xunta, podrá emitir en los próximos cinco años 692.910 toneladas de este gas de efecto invernadero. Sólo la superan las centrales térmicas, la cementera Cosmos de Ourol (Lugo) y la refinería de Repsol en A Coruña.

La Consellería de Medio Ambiente no ha presentado ninguna alegación al plan provisional del ministerio porque, según fuentes del departamento autónomo, la reducción de emisiones asignadas a las centrales térmicas es "muy importante". La consellería justifica la baja cuota otorgada las plantas de cogeneración en el hecho de que estas instalaciones no llegaron a gastar la de años anteriores.

Los ecologistas lamentan el aplauso de la Xunta al reparto de derechos de emisión del ministerio. Greenpeace, Ecologistas en Acción y Verdegaia critican que el bipartito no haya presentado aún el Plan Galego de Redución das Emisións de Gases de Efecto Invernadoiro, un documento que fijará la estrategia de la comunidad hasta 2012 para luchar contra el cambio climático.

Medio Ambiente dice que el plan estará listo a principios de 2008. El documento está siendo elaborado por este departamento y las consellerías de Medio Rural, Política Territorial, Industria, Vivenda y Pesca. Fuentes del bipartito afirman que contendrá medidas "presupuestadas" y con la reducción de CO2 que se logrará "cuantificada".