Seprona investiga la legalidad de las tortugas bobas y la de sus huevos

El Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) ha investigado y "supervisado" la documentación de las 10 tortugas bobas y los 80 huevos de este ejemplar amenazado que la Consejería de Medio Ambiente iba a reintroducir en aguas del Mediterráneo. La intervención tuvo lugar tras una denuncia interpuesta por Ecologistas en Acción el pasado 30 de septiembre por un supuesto delito de contrabando de especias amenazadas.

El subdelegado del Gobierno en Almería, Miguel Corpas, matizó que la Guardia Civil no ha inmovilizado ni aprehendido ningún ejemplar de tortuga sino que se ha limitado a "verificar" que la entrada de los huevos a nuestro país había sido legal. Francisco Toledano, de Ecologistas en Acción, alertó de una suelta de tortugas "mal planificada". "Venimos pidiendo información desde el mes de abril y no nos dicen nada. Toda la información que nos ha llegado ha sido fruto de las filtraciones de distintos sectores y de las investigaciones que hemos iniciado con otras organizaciones", dijo.

La consejera de Medio Ambiente, Fuensanta Coves, anunció la liberación de tortugas marinas en las playas de Cabo de Gata (Almería) como parte del proyecto Restauración de anidación de tortugas marinas en el litoral andaluz, con huevos de tortugas procedentes de Cabo Verde. La suelta de ejemplares se canceló por problemas con los transmisores para su seguimiento en libertad, según Medio Ambiente. El director de la Estación Biológica de Doñana, Fernando Hiraldo, aseguró ayer que los ejemplares de huevos y las tortugas "cuentan con todos los permisos legales de carácter internacional".