El consumo de almeja se ha duplicado en una década

El marisqueo a pie y a flote representa en Galicia uno de los sectores con mayor potencial económico y productivo, según los expertos. Un momento que los investigadores consideran óptimo para diseñar un plan estratégico consensuado que propicie el despegue empresarial y tecnológico del sector. Así lo expresó ayer Alberto de Coo, investigador del Centro de Investigaciones Marisqueras (CIMA) de la Xunta en la ponencia que presentó en el X Foro Iberoamericano de Recursos Marinos y de la Acuicultura que se clausura hoy en A Toxa.

Según De Coo, el consumo de almeja se duplicó entre 1995 y 2005 hasta las 30.000 toneladas. Con estos resultados cree que el sector puede renunciar a medio plazo al control de la gestión productiva por parte de la administración pública y apostar por un programa empresarial y tecnológico propios.

Además, De Coo cree que el papel de la Administración debe reducirse al de proporcionar programas de I+D+I, un ecosistema marino sano y una ordenación racional de los bancos marisqueros para lograr un plan estratégico en un sector en el que el número de mariscadores se ha reducido a la mitad es esta última década. De Coo considera que el excepcional comportamiento de los precios y la elevada calidad de los productos marisqueros y la demanda avalan esta nueva apuesta del sector que debe afrontar sistemas empresariales bien organizados, régimen de propiedad, control y gestión de recursos y perspectivas productivas.

Superado el 'Prestige'

Después de superar prácticamente los efectos negativos del Prestige, sobre todo en el marisqueo a flote en Ribeira y Aguiño, el año 2007 aparece como "un escenario productivo nuevo", afirmó De Coo. "Tanto en la recuperación de especies de calidad, como la almeja fina y babosa, como en importancia real de otras como la japonesa o el berberecho, que se encuentran en una fase clara de expansión".

Un nuevo escenario que, junto con los avances organizativos y la madurez del sector extractivo, permite plantear la posibilidad de un crecimiento y una recuperación de la producción de bivalvos en Galicia, apuntó Alberto de Coo. Para asegurar un aprovechamiento integral del sector, los expertos creen la Administración debe asesorar a los mariscadores para que sepan dosificar las diversas especies que tienen en reserva, lo que les permitirá amortiguar las bajadas de precios sin renunciar a incrementar la producción.

En la elaboración de este plan estratégico, los investigadores del CIMA sugieren una legislación adecuada, la elaboración de un sistema productivo-extractivo de playas y bancos naturales eficiente, conocimientos y técnicas seguras de cultivo, una imagen de marca y denominación de origen así como abrir canales de comercialización propios y dimensionar adecuadamente las actividades de diversificación.