"Economía prefiere el superávit a cualquier medida social"

Izquierda Unida (cinco diputados) ha endurecido su discurso frente al Gobierno y el Partido Socialista a semanas del inicio del curso político. El coordinador general de la coalición, Gaspar Llamazares, se ha enfrentado al Ejecutivo en asuntos como el plan para formar militares afganos que combatan a los talibanes en su territorio o la decisión de Ferraz de impedir a los socialistas navarros un pacto de Gobierno con su formación y Nafarroa Bai obligándoles a facilitar la investidura de Miguel Sanz (UPN). Llamazares, que observa un giro electoralista al centro del Ejecutivo, ya anunció que esta última decisión "traería consecuencias", como "una mayor exigencia" en el debate de los Presupuestos.

Pregunta. ¿Por qué han endurecido su discurso frente al Gobierno ante los Presupuestos?

Respuesta. Hay una razón política y otra presupuestaria. La primera se refiere a proyectos que siguen estancados en el Parlamento, como la Ley de Memoria Histórica y la de los Gobiernos Locales. La razón presupuestaria es el empecinamiento del Ministerio de Economía y Hacienda en anteponer el superávit presupuestario a cualquier medida de contenido social. El proyecto del Gobierno responde a un escenario esencialmente restrictivo.

P. ¿En qué se va a traducir ese distanciamiento en el debate?

R. En primer lugar, deben acelerarse esas políticas progresistas. El Gobierno tiene también que incorporar prioridades de carácter social y ambiental.

P. ¿Qué prioridades?

R. En primer lugar, hemos planteado triplicar el presupuesto de la ley de dependencia para pasar de los 400 millones que prevé el proyecto de Presupuestos a los 1.200. Al mismo tiempo, es necesario que se doten económicamente algunas leyes que tienen que ver con los derechos civiles, como la de Violencia de Género, la de Igualdad, las de Educación y Universidad... Otra de nuestras propuestas es que el Gobierno concrete de una vez en qué va a consistir la fiscalidad ambiental, además de otras medidas relacionadas con el cambio climático. Respecto al caos de Barcelona, nuestra alternativa presupuestaria, que ya hemos enviado al ministro Solbes, incluye una mejora importante en las comunicaciones ferroviarias metropolitanas.

P. ¿Cuáles de estas medidas son irrenunciables para IU?

R. En realidad no hay ninguna en concreto. Lo que pretendemos es que el presupuesto avance en los compromisos políticos de izquierdas y que no sea de estancamiento. Creemos que el Gobierno debe tener especial sensibilidad con materias concretas como la inmigración y el medio ambiente.