El buen ritmo de Colombia

La economía colombiana atraviesa por uno de sus mejores momentos de forma de las últimas décadas, con un crecimiento que llegó al 6,8% en 2006 y que este primer trimestre se situó por sobre el 8%. Los expertos advierten que este desempeño debe ser acompañado de un control del gasto, el control de la inflación y el aumento de la seguridad jurídica para las inversiones.

El déficit durante los primeros dos meses del año llegó al 1,2% del PIB. La meta del Ejecutivo es que no supere el 3,5% del PIB a final de 2007

La economía nacional creció un 6,8% en el pasado ejercicio y en el primer trimestre de 2007 ha elevado la tasa de crecimiento al 8,1%

Colombia creció un 8,1% en el primer trimestre frente al mismo periodo de 2006, una cifra que según la oficina de estadística local, se ha visto impulsada por la construcción, la industria y el comercio. Este dato se mantiene en la línea con las previsiones de crecimiento para este año que se sitúan en una horquilla del 6% al 7%. La economía colombiana creció además un 6,8% en 2006, que fue el mayor incremento anula desde 1978 y que confirmando una trayectoria ascendente indicada tras la crisis de 1999.

En el primer trimestre ha habido crecimiento en todos los sectores, pero sobre todo en infraestructuras. La industria manufacturera creció un 14,6%, la construcción lo hizo 28,3% y el comercio un 11,2%. No obstante, los verdaderos motores del desarrollo reciente de Colombia han sido el consumo privado, la inversión extranjera y el comercio exterior cuyas exportaciones crecieron un 9,43%, impulsadas por un inusual escenario de materias primas, marcando récords históricos de cotización en el mercado internacional.

Los analistas destacan que en 2007 la clave volverá a ser el dinamismo del consumo que está creciendo a tasas del 6%, lo que sumado a las inversiones, que superan el 25% de progresión anual, plantea un escenario favorable para la consolidación de la mejora económica. Según el Observador Económico y Financiero del Servicio de Estudios de Caja Madrid, gran parte de este dinamismo se debe a una mayor seguridad pública, a una contención de la inflación y a la paulatina caída del paro.

No obstante, en una reciente comparecencia, el propio presidente Álvaro Uribe dijo que este crecimiento se podrá seguir manteniendo, pero se requiere un esfuerzo fiscal, que no sigan aumentando las tasas de interés y se consolide su política de seguridad. Debido al creciente despegue del consumo, el Banco Central se ha visto en la necesidad de contener el alza de los precios, que hasta 2006 parecían controlados por debajo del 5% anual. El último dato indica que la inflación ha crecido un 5,8% en marzo y será difícil mantenerse bajo la meta oficial de 4,5%.

Desde agosto de 2006, el instituto emisor colombiano ha elevado los tipos hasta el 8,25%, el último dato de marzo. Una modificación que ha sido criticada desde el ejecutivo, argumentando que podría frenar el crecimiento, el aumento de los créditos y la llegada de capitales extranjeros. Esto tiene sentido, considerando además que el Banco Central no se cierra a realizar nuevas alzas si la inflación sigue en aumento.

Control de las cuentas

La otra tarea que tiene la Administración económica es el control de sus cuentas. El déficit durante los primeros dos meses de 2007 llegó hasta el 1,2% del PIB. La meta del Ejecutivo para todo el ejercicio 2007 es que el desequilibrio del Gobierno Central no supere un 3,5% del PIB. Esto significa que la deuda se situaría por debajo del 45% del producto, por primera vez desde 2000 y la externa se mantendrá en torno al 26% desde el 40% en el periodo 2000-2004.

Para mejorara los ingresos y reducir el peso del Estado en estos momentos se debate la posibilidad de enajenar o compartir la propiedad de tres de sus compañías energéticas (Isa, Isagen y Ecopetrol). El objetivo es que las dos primeras se privaticen, y la tercera realiza una ampliación de capital que permita al Estado conservar el 80% de sus acciones. El objetivo último es pagar buena parte de la deuda con estos recursos.