Caixa Galicia encarga a Portela la reforma del Teatro Fraga de Vigo

Desde la adquisición del edificio Fraga de Vigo a sus anteriores propietarios en 2001, la Fundación Caixa Galicia manifestó su intención de reformarlo para convertirlo en un gran centro cultural. Pero un conflicto con los gestores de la discoteca ubicada en sus bajos ralentizó el proceso. Solucionado el pleito por la vía judicial, el próximo 31 de agosto la discoteca, que fue inaugurada en 1973, tendrá que cerrar sus puertas definitivamente.

Los responsables de la discoteca Nova Olimpia, situada en los bajos del inmueble, alegaron tener contrato de arrendamiento en vigor hasta 2013. La justicia ha dado la razón a la entidad financiera en fechas recientes, por lo que Caixa Galicia tiene vía libre para empezar las obras. Ayer presentó el proyecto del nuevo equipamiento cultural, que lleva la firma del arquitecto pontevedrés César Portela, artífice del diseño de otra infraestructura importante para Vigo como es el auditorio-palacio de Congresos.

El acto de presentación tuvo lugar en la Casa das Artes, recinto municipal que hasta mañana acoge la primera retrospectiva en España de la pintora Tamara de Lempicka, la última producción artística de gran envergadura que Caixa Galicia programa en la ciudad. El director general de la entidad, José Luis Méndez, expresó su satisfacción por la concreción de un proyecto al que tildó de "brillante y vanguardista, que situará a esta ciudad en el mapa internacional de las grandes infraestructuras culturales". Méndez señaló el compromiso de respetar minuciosamente un edificio "emblemático y querido" que constituye una joya de la arquitectura civil, e indicó que la reforma de Portela explorará todas sus potencialidades.

El arquitecto señaló los tres principios de su propuesta: la conservación de los valores urbanísticos y arquitectónicos del edificio, restaurar los perdidos con el tiempo o dañados por reformas sucesivas del trazado original y la suma de otras aplicaciones como respuesta a las necesidades de su nueva función. La descripción básica habla de un auditorio con capacidad para 1.200 butacas y un foso para la orquesta, varias estancias polivalentes y una gran sala de exposiciones, en el emplazamiento actual de la discoteca, que recuperará los pavimentos y escaleras originales. Uno de los rasgos más significativos del proyecto de César Portela es el aislamiento del auditorio con respecto a la caja de piedra exterior del edificio.

Es lo que su artífice ha llamado "la grieta", que se obtendrá tras eliminar todos los forjados situados entre la fachada y el volumen de madera rojiza que recubre el auditorio. El hueco, que deja al aire la silueta de la caja interior, será visible desde fuera a través de grandes acristalamientos de una sola pieza. Esta disposición pretende también remarcar la excepcionalidad de un teatro que Méndez comparó con el Teatro Massimo de Palermo, recinto de acústica legendaria.

La previsión es que el edificio, diseñado por Luis Gutiérrez Soto a mediados del siglo XX, renazca en el verano de 2009. El nuevo emblema de la fundación se unirá a su centro de la calle Policarpo Sanz y servirá, según expresó José Luis Méndez, para "dotar a la ciudad de una programación muy ambiciosa".