La plaza Euskadi tendrá el estilo clasicista del arquitecto Robert Krier
El Ensanche bilbaíno inspira la nueva manzana de viviendas
La plaza de Euskadi, la parcela de Abandoibarra situada frente a la entrada principal del Museo de Bellas Artes de Bilbao, tendrá el estilo clasicista del arquitecto luxemburgués Robert Krier, que ha diseñado una manzana formada por seis edificios de viviendas inspirados por las construcciones del Ensanche bilbaíno. Será un conjunto línea tradicional, de ocho plantas, con seis fachadas diferentes de piedra gris y ladrillo, con esculturas y miradores, y rematado por dos cúpulas.
Frente a la ruptura con la arquitectura tradicional de las formas del Museo Guggenheim o las torres de cristal del complejo Isozaki Atea de Uribitarte, las nuevas viviendas de la plaza Euskadi seguirán las líneas dominantes en el Ensanche de Bilbao. Krier, en colaboración con el arquitecto francés Marc Breitman, ha proyectado el bloque siguiendo su filosofía fiel al modelo de ciudad europea, en la que los edificios se unen para formar manzanas. "Respetando la tradición se respeta la historia", dijo Krier al presentar la maqueta del proyecto, que se comercializará bajo la denominación Artklass.
Krier defendió la creación de un lenguaje arquitectónico que pueda convivir con todos los estilos arquitectónicos de la ciudad. En su opinión, la arquitectura del siglo XXI vive una situación caótica, como nunca antes se había conocido. El arquitecto luxemburgués sueña con un futuro en el que se imponga el orden. Y comienza por respetar la escala de la ciudad en sus preoyectos, para que "todo el mundo se sienta cómodo". "Fuera de escala los edificios son inhumanos", añadió.
Krier ya ha trabajado con anterioridad en Euskadi. Junto a su hermano Léon diseñó el barrio residencial de Benta Berri, en San Sebastián, entre otros proyectos. La promotora de las viviendas, Vizcaína de Edificaciones -la empresa que también impulsa el proyecto diseñado por el arquitecto japonés Arata Isozaki en el antiguo depósito frnco de Uribitarte- ofrecerá un máximo de 190 pisos, de 60 a 170 metros cuadrados de superficie, 210 plazas de aparcamiento y locales comerciales en los bajos, porticados en algunas fachadas, de la manzana.
El tamaño de las viviendas se adaptará a la demanda y su precio rondará los 7.000 euros por metro cuadrado. Las obras comenzarán en breve y finalizarán en el plazo de dos años y medio.
