Colombia en Colombia
Médicos sin Fronteras denuncia la violencia que sufre el país con una exposición en la estación de metro bautizada con su nombre
Dos helicópteros bombardeando una ciudad, montañas repletas de tanques y nueve soldados de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) apuntando sus ametralladoras hacia hombres desarmados. Esto es lo que dibujó el colombiano Elías Pérez Hoyos, de 7 años, cuando los trabajadores de Médicos Sin Fronteras le pidieron que plasmara sobre el papel aquello que le daba miedo.
La estación de metro de Colombia (líneas 8 y 9) acoge la exposición Sueño en riesgo. Atrapados en el círculo de la violencia en Colombia, ideada por la organización Médicos Sin Fronteras (MSF). El recorrido por las fotografías de Jesús Abad Colorado, Dana Lixenberg y Stephan Vanfleteren en algunas de las zonas más conflictivas del país -La Gabarra, Sincelejo y Saiza- refleja tres etapas en la vida de los civiles colombianos: la amenaza constante de la violencia, la miseria que sufren los desplazados a zonas urbanas -más de tres millones-, y el desafío del retorno a la nada.
"Las fotos impresionan, y además son niños, pobrecitos", dice una usuaria del metro
Menores colombianos dibujan lo que les da miedo: tanques y hombres con pistolas
El conflicto colombiano ha ocasionado, según MSF, más de 60.000 muertos y 4.000 desaparecidos desde 1985; además de 23.145 secuestros en los últimos 10 años. Mediante esta exposición, presentada el 14 de junio en la Plaza de España, MSF pretende "dar más visibilidad al sufrimiento de la población colombiana [42 millones de habitantes], que soporta siempre la peor parte de este conflicto y sufre el mayor olvido".
MSF también aprovecha la muestra para alertar de las dificultades que tienen los trabajadores humanitarios para llegar a las poblaciones que se encuentran en zonas de enfrentamientos.
"Aquí haría falta un cementerio de varios pisos para enterrar a todos los muertos". Es una de las citas que se pueden leer en uno de los paneles que componen la exposición. Su autora, una política municipal colombiana que dimitió por amenazas en diciembre de 2005. Junto a esta y otras frases igual de contundentes están las fotos de Jesús Abad, que reflejan la amenaza en comunidades rurales y aisladas. Entre ellas, una con tres niñas subidas a un caballo y al lado de un cartel que dice: "Cambie la coca por cacao. Proteja el futuro de su hijo antes de que sea tarde".
En el vestíbulo del metro la gente se para. Aunque vayan corriendo, son pocos los que pueden pasar de largo ante los 11 paneles que ocupan una parte de la estación de Colombia.
"Las fotos impresionan, y además son niños, pobrecitos". Una usuaria del metro se lleva las manos a la cabeza al ver las fotografías de Dana Lixemberg. Adolescentes posando con la mano en la cintura como si fueran modelos, pero con la mirada triste. Y al lado de las fotos, dibujos de niños. Tema: ¿a qué le tengo miedo? Tanques, muertos y sangre aparecen en todas las pinturas. Sueño en riesgo seguirá estando en la Colombia suburbana de Madrid hasta el 27 de julio. La exposición viajará a finales de agosto a la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, y en octubre, al Festival Sonimag de Barcelona.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.