"Cualquier piso puede ser un centro de mayores"

La pregunta del millón es la de cómo ha podido ocurrir algo así sin que nadie se diera cuenta antes de que la periodista de Tele 5 se infiltrara con una cámara oculta y como trabajadora de la residencia Juan XXIII de Alcobendas.

¿Qué se necesita para abrir una residencia de ancianos? Los requisitos contemplados en la Orden 612/1990, de 6 de noviembre, de la Consejería de Integración Social, la normativa a la que remite la Comunidad de Madrid cuando es preguntada a este respecto.

Cualquier centro destinado a ofrecer servicios sociales debe cumplir muchas exigencias: una memoria que explique la actividad a desarrollar, que contenga los objetivos, la metodología, un programa de intervención, el perfil de la población que se va a atender y la capacidad asistencial; un documento que acredite la propiedad y el derecho a uso del inmueble en el que se instale la residencia; un proyecto sobre el equipamiento que se necesita; otro proyecto de plantilla que especifique las categorías profesionales y su adscripción, según horarios y turnos, a los distintos servicios del centro.

Todos necesarios para que la Comunidad conceda una licencia de apertura (normalmente de hasta 25 años). Según Ana González, la responsable del área de Asuntos Sociales de CC OO, es una norma demasiado genérica: "Tendría que ser más específica y rigurosa. Así, en cualquier piso te pueden montar una residencia", asegura.

Pese a las tres sanciones (administrativas) que ya tenía el centro y la condena que pesaba sobre la dueña de la residencia por la muerte de una anciana en otro de los centros que dirigió, no se le había abierto ningún expediente hasta el lunes, tras las imágenes televisadas en Tele 5. Aunque el requisito del personal contratado parecía incumplirse sistemáticamente.

La periodista de la cadena que se infiltró como empleada en la residencia explicó ayer en una entrevista en Tele 5 que para trabajar en el centro los responsables no le pidieron "absolutamente nada". "Los empleados que yo conocía eran en su mayoría inmigrantes, sin cualificación. La dueña había creado un sistema de captación de personas sin papeles".

La trabajadora que fue grabada y que estaba al cuidado de los ancianos atados, una inmigrante, decía ante la cámara: "No tengo papeles, no me dan justificantes de lo que me pagan".

CC OO hace una llamada a la ciudadanía: "Cualquier persona puede denunciar estos hechos".