El PSOE ofrece a Unió Mallorquina un pacto para gobernar Baleares
"Queremos tranquilizar a todo el mundo económico", afirmó ayer Francesc Antich, candidato del PSOE a la presidencia balear, al postularse para encabezar un nuevo Gobierno multipartito, similar al que presidió entre 1999 y 2003. Antich propuso públicamente entablar negociaciones "globales" con la minoría bisagra de Unió Mallorquina (UM), que tiene la llave de todas las combinaciones posibles para cerrar el nuevo mapa político.
El PP, partido más votado en las islas con el 46% pero sin mayoría absoluta en el Parlamento, Ayuntamiento de Palma y Consell de Mallorca, corteja a UM para asegurarse el control en estas instituciones y, en todo caso. Las incompatibilidades personales manifiestas entre los candidatos del PP y UM en el Ayuntamiento de Palma y el Consell de Mallorca bloquean, de entrada, la reedición del actual acuerdo PP-UM en ambos enclaves.
El socialista Antich ha mantenido los primeros tanteos iniciales con la figura clave de la política balear, Maria Antònia Munar, de UM. El socialista no aventuró un pronóstico y aseguró que las negociaciones no serán desveladas hasta concluirse. Antich aseguró que cuenta con la anuencia de sus socios naturales, el Bloc de izquierdas, PSM-IU-Verds-Esquerra, para intentar afrontar una alianza arco-iris: "Estamos ante un momento histórico en el que todos debemos estar a la altura".
Los portavoces empresariales y patronales que entre 1999 y 2003 se enfrentaron abiertamente al Gobierno de Antich han expresado ya su neutralidad y respeto ante eventuales convergencias.
El objetivo que pretende el PSOE es cerrar "un gran acuerdo" en todas las instituciones, Gobierno balear, Consell de Mallorca y Ayuntamiento de Palma para formar "gobiernos progresistas, estables y cohesionados, liderados por socialistas". Los candidatos del PSOE, Aina Calvo en la alcaldía Palma; Francina Armengol en el Consell de Mallorca y el propio Antich aspiran a presidir los gobiernos respectivos. UM puede pretender la alcaldía y las presidencias del Consell y el Parlamento.
Unió Mallorquina controla desde 1995 la isla Mallorca con hegemonía, tanto con pactos a la izquierda como con el PP, sin haber superado nunca el 10% de los votos.
La Junta Electoral ratificó ayer por la tarde, por una diferencia de 37 votos, el triunfo del PSOE Eivissa pel Canvi en el Consell de Ibiza, en el recuento de los sufragios emitidos por los residentes ausentes. Xico Tarrés sumó 19.465 sufragios y siete consejeros, mientras que la lista de Pere Palau, del PP, fue apoyada por 19.428, y seis consejeros. El PP, en el recuento de mesas, quedó a 53 votos y confiaba en dar el vuelco.
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