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El PP se queja de que el bachillerato será más largo aunque siempre lo ha pedido

Más de una década lleva el PP quejándose de que el bachillerato de dos años es demasiado corto. En los noventa pedían tres años de bachillerato a costa de rebajar un curso la educación obligatoria (siendo Mariano Rajoy ministro de Educación), aunque en su posterior ley educativa lo dejaron en dos. Los populares ya no sugieren rebajar la educación básica, pero su petición de un bachillerato más largo no ha dejado de oírse. El propio portavoz de Educación del PP en el Congreso, Eugenio Nasarre, se quejaba la semana pasada de lo corto que resultan los dos años.

Ayer, sorprendentemente, las críticas fueron por lo contrario. La secretaria de Políticas Sociales del PP, Ana Pastor, lamentó que el bachillerato será ahora más largo. La nueva propuesta del Gobierno permite a los alumnos sacar el bachillerato en tres años mediante un curso puente en el que se apruebe lo que quedó de 1º y se avance un poco en las asignaturas de 2º. La condición es que hayan aprobado más de la mitad de las asignaturas del primer curso. "Podrán estar cuatro años o más. Quizá con este bachillerato sólo se salven los ricos, porque ¿qué familia se puede permitir tener a sus hijos cuatro años en el bachillerato?", interrogó Pastor. Preguntada por este cambio de postura en su partido, reconoció que siempre han defendido un bachillerato más largo, "pero no a la carta, porque ahora hay 230 posibilidades de bachillerato", en función de cómo se combinen las asignaturas.

El sistema anterior permitía estar cuatro y muchos más años cursando el bachillerato, porque se podía repetir cada uno de los tres cursos de entonces, con un sistema de promoción idéntico al que el PP defiende con el objetivo de fomentar la cultura del esfuerzo. "Rebajando las marcas no se ganan medallas, con esta promoción automática habrá menos conocimientos y más fracaso. Si hubiera más asignaturas, podrían ser más años". Además, Pastor acusó al Gobierno de querer sólo que mejoren las estadísticas y le preguntó cómo se va a financiar esta reorganización de enseñanzas.

La ministra de Educación, Mercedes Cabrera, se comprometió ayer a aportar los recursos necesarios para implantar este nuevo bachillerato, "si se demuestra que hace falta". Cabrera emplazó al PP a debatir su postura, pero los viceconsejeros de las comunidades gobernadas por el PP se marcharon de la reunión de la Conferencia Sectorial de Educación y pidieron que se iniciara un debate con los consejeros sobre este cambio.

Por otro lado, la ministra presentó a los responsables universitarios el informe sobre la financiación de la educación superior. En él, los expertos proponen introducir, entre los criterios de financiación, la investigación y la calidad, además de una inyección extra de 2.700 millones de euros en cinco años. Cabrera no anunció ningún compromiso, aunque calificó el informe como "una base excelente para empezar a debatir".

La ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera.
La ministra de Educación y Ciencia, Mercedes Cabrera.EFE

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