Bruselas reduce a la mitad el plan para arrancar viñas

La Comisión de la Unión Europea ha rebajado en sus últimos documentos para la reforma de la Organización Común de Mercado sus pretensiones sobre el arranque de viñedos. Frente a una superficie para arrancar en cinco años de 400.000 hectáreas, en este momento el objetivo se eleva a entre 150.000 y 200.000 hectáreas, con limitaciones según zonas. Sí se eliminarán todas las regulaciones del mercado.

Este planteamiento comunitario se aleja tanto de las posiciones de las organizaciones agrarias españolas, como de las defendidas por Agricultura, que pide un periodo transitorio en la reforma. En medios oficiales españoles se estima que algunos de los documentos comunitarios en esta fase final responden a posiciones francesas y que no serán los criterios definitivos de la Comisión.

Además del cambio en los objetivos de arranque, las propuestas más importantes se refieren a los mercados. Bruselas mantiene su postura de eliminar los mecanismos de regulación del mercado basados en las destilaciones para la obtención de alcohol para uso de boca o destilación de crisis. Mantiene las prestaciones vínicas.

En viñedos, frente a la propuesta inicial de eliminar en cinco años 400.000 hectáreas, Bruselas rebaja los arranques a entre 150.000 y 200.000 hectáreas, estableciendo además limitaciones por zonas. Se plantea también eliminar los derechos de plantación a partir de 2013.

En exportaciones, se propone eliminar las restituciones a la exportación desde 2009 a 2103. Mientras, en importaciones, se opone a la vinificación de los mostos importados, tal como defendía el sector. La Comisión se opone asimismo al enriquecimiento artificial del vino de baja graduación con azúcar. Y en presupuesto, se mantiene la ficha financiera de 1.300 millones. De esos fondos, en 2009 se asignarían 623 millones para los cheques por países, cifra que llegaría a los 830 millones en 2013.