Más dinero para la investigación privada

Jesús Alba (Madrid, 1950), estuvo en la clínica La Paz como residente y adjunto. Fue profesor universitario y en 1982 llegó a Lugo para desempeñar la jefatura de Anatomía Patológica en lo que hoy es el complejo hospitalario Xeral-Calde.

Pero su actividad en la medicina pública duró poco tiempo. En 1987 pidió la excedencia y se dedicó a su laboratorio en Polusa. Siempre se interesó por la biología molecular, y ahora ve concluidas parte de sus inquietudes investigadoras con la fabricación de reactivos para diagnóstico.

Alba y tres socios más constituyeron Cenbimo con un capital social de 450.000 euros. Su proyecto de sonda lo presentaron al Centro para el Desarrollo de la Tecnología e Innovación (CDTI), del Ministerio de Industria. Allí evaluaron el trabajo y lo incluyeron dentro del grupo de empresas de nueva tecnología (Neotec). Esto les sirvió para lograr un crédito de 300.000 euros y, a partir de ahí, iniciar la investigación.

El Ministerio de Industria incluyó el proyecto de Cenbimo entre los 15 mejores proyectos de innovación en España de los algo más de 300 que se presentaron. Luego, a través del Igape, el año pasado les otorgaron 192.000 euros de subvención a fondo perdido y han solicitado más ayudas a la Xunta de Galicia que ya les fueron concedidas, aunque "nos ha costado", subraya el investigador.

Cuentan con los aparatos habituales de un laboratorio: termocicladores, centrifugadores, balances espectrofotómetros y, entre otros, el "aparato estrella", un secuenciador que desgrana en pantalla toda la cadena del ácido nucleico.

El objetivo de este equipo lucense es el diagnóstico y la investigación. Luego serán otros los que se dediquen al fármaco. "Con la investigación ponemos peldaños y lo que se intenta es que otro suba el peldaño que tú has hecho". "Si podemos empezar a detectar genes embrionarios en cáncer, a alguien se le ocurrirá alguna forma de inhibirlos", razona Alba, quien aboga por formar redes de equipos de trabajo que se intercambien casos. Actualmente disponen de "muchísimos contactos", aunque aún no han formado un flujo organizado, "pero lo organizaremos", aventura.

Alba es partidario de modificar el sistema de distribución del dinero que el Estado destina a la investigación. "Hasta ahora, el dinero va casi todo a la universidad con un resultado más bien pobre", se lamenta.