Londres amenaza con no devolver la autonomía al Ulster si no hay acuerdo de Gobierno
Los unionistas condicionan su entrada en el nuevo Ejecutivo a que todo se aplace seis semanas
El ministro británico para Irlanda del Norte, Peter Hain, amenazó ayer con mantener suspendida la autonomía de Irlanda del Norte si los partidos no se ponen de acuerdo hoy para formar un nuevo Ejecutivo. Pero, debido a la exigencia de los unionistas de Ian Paisley de retrasar hasta mayo el pacto con el Sinn Fein, Hain admitió que no tiene inconveniente en aceptar ese calendario si tiene el respaldo de las demás fuerzas políticas.
Peter Hain enfatizó en declaraciones a la BBC que el retraso exigido por el Partido Democrático del Ulster (DUP), de Paisley, no debía ocultar el hecho sin precedentes de que, por primera vez, ha aceptado participar en un Gobierno con el Sinn Fein, aunque sea rompiendo el plazo fijado por el Gobierno.
No es casual que lo que tenía que haber sido un hecho histórico haya tomado el formato de una nueva crisis. Ha sido ése un recurso habitual en el proceso de paz de Irlanda del Norte al que han echado mano los partidos, y especialmente los republicanos del Sinn Fein, para presentar como victorias lo que sus seguidores más extremistas podían percibir como derrotas. El DUP ha roto el tabú de gobernar con el Sinn Fein pero lo ha hecho haciendo ver que no sólo por el hecho de no acatar los ultimatos del Gobierno británico.
No es sólo una cuestión ante la galería: es un peaje para mantener la unidad del partido. Las resistencias del Sinn Fein a apoyar a la policía acabaron con un voto del 95% de las bases. El sábado, el 90% de la ejecutiva del DUP aprobó el gran anatema: gobernar junto a los republicanos.
El plazo del 26 de marzo era una fecha aleatoria. A Tony Blair lo mismo le da que la autonomía se restaure hoy o dentro de seis semanas como exige el DUP. Lo único que le importa es que se restaure antes de que él se haya ido de Downing Street, circunstancia que ocurrirá a finales de junio salvo que haya un cataclismo. El Sinn Fein también puede esperar, pero no mucho: el restablecimiento de la autonomía tiene que ser antes de las elecciones generales de Irlanda, previstas para el 24 de mayo.
La declaración aprobada por el DUP el sábado y difundida ayer no deja dudas en torno al nivel de su compromiso: "El DUP apoyaría y participaría plenamente en un Ejecutivo de Irlanda del Norte si los poderes son devueltos en una fecha pactada de mayo de este año". Y como prueba de buena voluntad expresa también su voluntad de participar en "trabajos preparatorios incluyendo informes preministeriales y la finalización de un programa de Gobierno". Se entiende así que hoy ni designarán a Ian Paisley como ministro principal ni a los candidatos a ocupar carteras ministeriales, aunque nada es seguro en Irlanda del Norte.
Aunque el Sinn Fein ha pedido que se suspenda la autonomía y se pongan en marcha las medidas de cooperación con Irlanda previstas como represalia si el DUP no acepta formar Gobierno, también ha dejado claro que no romperá la baraja y ha exigido negociaciones directas con Paisley para llegar a un acuerdo sobre la nueva fecha de constitución del Ejecutivo.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.