El juez deja en libertad con cargos a los familiares de Roca

La esposa y el cuñado de Juan Antonio Roca, supuesto cerebro de la trama de corrupción en Marbella, quedaron ayer en libertad con cargos tras depositar 90.000 y 60.000 euros de fianza. Además, la hija del ex asesor urbanístico y una empleada de una de sus inmobiliarias salieron a la calle sin fianza. Los cuatro habían sido detenidos el miércoles en una nueva fase de la Operación Malaya. El juez Miguel Ángel Torres les acusa de blanquear dinero mediante la compra de billetes de lotería premiados.

Los cuatro últimos detenidos en el caso Malaya, la mayor operación contra la corrupción municipal en Marbella (Málaga), llegaron a los juzgados de la ciudad sobre las diez de la mañana. Viajaron desde la comisaría provincial, en cuyos calabozos habían pasado la noche, escoltados por al menos una decena de agentes del Cuerpo Nacional de Policía. María Rosa Jimeno y su hija, María Roca, descendieron de un coche patrulla, y Antonio Jimeno, cuñado de Roca, y la ciudadana de origen sueco Karen Marika Mattson, de otro.

Los arrestados aguardaron la llamada del juez hasta las 12.30, hora a la que comenzó a declarar Karen Marika Mattson, detenida el miércoles en Los Alcázares (Murcia). La mujer, de nacionalidad sueca, es directora comercial de la inmobiliaria One Properties, propiedad de Roca. Según José Manuel Vázquez, su abogado defensor, el juez le preguntó por unos décimos de lotería y un dinero que había sido depositado en una cuenta de una sucursal de La Caixa de la localidad murciana. Vázquez aseguró que su patrocinada negó cualquier relación con estos billetes de lotería y mantuvo que la declaración que se le había tomado no tenía ningún sentido. "Espero que se sobresea porque no hay argumentos contra ella", declaró. "Es una simple empleada sin bienes ni grandes propiedades".

"Detención sorprendente"

María Roca, la hija del supuesto cerebro de la trama, dejó los juzgados por la puerta principal y a cara descubierta pasadas las 16.30. La joven, de 23 años, rehusó hacer declaraciones. Luis Carmona, su abogado, dijo que la detención la había "sorprendido" mucho porque la abordaron en su colegio mayor de Madrid, delante de sus compañeras, y la llevaron esposada en un Audi hasta Málaga. La esposa de Roca y su cuñado Antonio fueron los últimos en declarar.

El juez decidió su ingreso en prisión eludible bajo fianza de 90.000 euros y 60.000 euros, un dinero que sus abogados tardaron una hora en reunir. Sobre las 19.30, ambos dejaban los juzgados sin declaraciones. Rosa Jimeno ya fue detenida en diciembre, también por blanqueo de capitales, y también en esa ocasión quedó en libertad con cargos. Su hermano, Antonio, trabajaba hasta hace poco en La Caixa como director de la sucursal de Los Alcázares. Fue despedido después de que el juzgado que investiga el caso Malaya requiriera información sobre sus ingresos. Jimeno contó a sus superiores que le había tocado la lotería "seis o siete veces" en un año.