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El príncipe Enrique irá a la guerra de Irak para dar moral a las tropas

Hijo de la princesa del Pueblo, Diana Spencer, el príncipe Enrique de Inglaterra quiere convertirse en el príncipe Valiente. El primer paso está dado: aunque aún no es oficial, sus superiores han confirmado a la prensa británica que el tercero en la línea de sucesión a la Corona británica será destinado a Irak, donde su escuadrón deberá servir durante seis meses. Aún no se han concretado ni la fecha ni el destino, pero se cree que ocurrirá en abril y que el escuadrón del príncipe formará parte de la Primera Brigada Mecanizada en Basora, al sur de Irak.

La decisión de enviar a la guerra al hijo pequeño del príncipe de Gales se ha tomado tras meses de conversaciones entre el Ejército y Clarence House, como se conoce a la oficina del príncipe Carlos. Enrique estaba empeñado en ser destinado a Irak, y el Ejército lo veía con muy buenos ojos por la moral que puede dar a unas tropas que sufren en carne propia la impopularidad de la guerra. Pero la familia real no ha dado el hasta tener garantías de que nadie jugará con la seguridad del príncipe.

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El regimiento del príncipe Enrique, enviado a Irak

Enrique no hace más que seguir la estela de su tío Andrés, que hace 25 años participó en la guerra de las Malvinas. Con 22 años y muchas polémicas detrás, Enrique parece haber encontrado en la milicia la estabilidad que nunca ha tenido. Condenado al ocio y a sentirse bastante inútil, el destino de Enrique como hermano menor de Guillermo es resignarse a no hacer nada salvo que alguna desgracia inesperada le acabe convirtiendo en heredero de la corona que algún día debería ceñir su hermano mayor.

Su vida ha estado llena de controversia. Primero se puso en duda su pureza sanguínea cuando se extendió la creencia de que su padre biológico no era el príncipe Carlos, sino el ex oficial y primer amante de Diana, James Hewitt, con el que tiene un sorprendente parecido. Luego llegaron las juergas y los flirteos con el cannabis, y sonoras meteduras de pata como la ocurrencia de aparecer disfrazado de oficial nazi en una fiesta.

[Por otra parte, insurgentes iraquíes hicieron explotar ayer tres coches en las afueras de un puesto militar estadounidense en Tarmiya, a 45 kilómetros al norte de Bagdad, causando la muerte de dos soldados y heridas a otros 17. Además, el Ejército informó de la muerte de tres marines y un soldado en la provincia de Al Anbar].

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