"Los países europeos han cerrado los ojos"
La redacción final del informe sobre actividades de la CIA en Europa contiene graves acusaciones contra 14 gobiernos por su tolerancia y complicidad con las actividades ilegales de los servicios secretos de EE UU. En palabras de los eurodiputados, "los países europeos han cerrado los ojos", entre 2001 y 2005, ante "secuestros extrajudiciales, transportes ilegales de detenidos y torturas".
El documento confirma que durante dichos cinco años "al menos 1.245 vuelos de aviones fletados por la CIA cruzaron el espacio o aterrizaron en aeropuertos" europeos, con personas detenidas ilegalmente. Los países implicados en esta red de secuestros y entregas extraordinarias son: Alemania, Suecia, España, Irlanda, Grecia, Chipre, Dinamarca y Rumania.
Las conclusiones subrayan también la falta de cooperación con la Comisión de Investigación por parte de Austria, Italia, Polonia (que ni siquiera recibió a la comisión), Portugal y Reino Unido. Los principales hechos probados son:
- Secuestros ilegales. Se mencionan hasta 21 casos de secuestros ilegales en los que las víctimas fueron trasladadas a través de países europeos o eran residentes en Estados europeos en el momento de su secuestro. Se pide a esos Estados que "compensen a las víctimas inocentes de las detenciones ilegales".
- Tortura. Las investigaciones indican que, "en la mayoría de los casos [los traslados], implicaban detenciones incomunicadas y torturas", confirmadas por las víctimas o sus abogados. Según el ex embajador de Uzbekistán, Craig Murray, "el intercambio de información obtenida bajo tortura por los servicios secretos de terceros países a los servicios secretos del Reino Unido ha sido una práctica conocida y tolerada por el Gobierno británico".
- Bases militares de EE UU. El informe sostiene que "centros secretos de detención temporal pueden haberse localizado en las bases estadounidenses de los países europeos".
- Cárceles secretas. Tras un intenso debate, el informe admite que "no es posible confirmar ni negar la existencia de centros de detención secretos localizados en Polonia".
- Falta de cooperación. Los parlamentarios lamentan "la falta de cooperación [con la investigación] de muchos Estados miembros y del Consejo de la Unión". Según el informe, "la grave falta de respuestas concretas a las preguntas de las víctimas, ONG, medios de comunicación y parlamentarios ha reforzado la validez de las ya bien documentadas acusaciones". Los diputados piden a los Gobiernos afectados "que proporcionen informaciones completas y objetivas" y sometan "los casos descubiertos a una investigación independiente".