El Gobierno italiano ve con recelo la posible entrada de Telefónica en Telecom Italia

El Gobierno italiano ve con recelo el acercamiento de Pirelli a Telefónica para ofrecerle la toma de una participación indirecta en Telecom Italia, según publicaba ayer la prensa italiana. El Ejecutivo de Romano Prodi ya ha bloqueado la fusión de Abertis con Autostrade y la autoridad monetaria italiana también obstaculizó la compra de BNL por el BBVA.

Telefónica confirmó ayer a la Comisión Nacional del Mercado de Valores que Pirelli le ha ofrecido tomar una participación minoritaria en el capital de la sociedad italiana Olimpia, que a su vez es la mayor accionista de Telecom Italia. "Se han mantenido contactos exploratorios preliminares con Pirelli, que es el accionista mayoritario de la citada sociedad", pero "no existe ningún acuerdo con Pirelli respecto de esta posible inversión, sus términos o posibles condiciones", indicaba el comunicado.

Fuentes conocedora de los contactos aseguran que estos se han producido al más alto nivel y que contemplan la toma de una participación entre el 30% y el 49% en Olimpia, que posee el 18% de Telecom Italia.

Hay grandes obstáculos para que la operación fructifique. Además de las trabas políticas, la inversión no sería bien vista por los analistas, ya que Telefónica tomaría una participación minoritaria en una sociedad instrumental no cotizada. Para poder dar ese paso, la operadora española exigirá un pacto parasocial que le permita no quedarse atrapada en con una participación nada líquida y sin poder ejercer influencia real alguna en la gestión.

Mayorías reforzadas para la toma de decisiones, derechos de tanteo, opciones cruzadas de compra y venta y pactos de liquidación de la sociedad en caso de diferencias insuperables son algunas de las fórmulas que permitirían regular esa relación, pero eso dejaría sin salvar el otro posible gran obstáculo: el precio al que cerrar la operación. Hay una referencia de mercado, la cotización de Telecom Italia, pero no es de descartar que Pirelli quiera cobrar una prima de control por una participación que no lo es, a menos que por contrato se asegure opciones más atractivas de cara al futuro.

En todo caso, Telefónica reiteró ayer los compromisos financieros relativos a inversiones y adquisiciones manifestados públicamente ante los analistas en Valencia en mayo de 2006, que limitaban a 1.500 millones de euros el volumen de compras netas para los siguientes 18 meses. Al tratarse de una cifra neta, la prevista venta de Endemol y la de Airwave (filial de O2) permitirán que ese listón suba. Pero gracias a esa reafirmación, la agencia de calificación crediticia Standard & Poor's (S&P) decidió ayer mantener el rating de Telefónica al entender que "las opciones de que estas conversaciones preliminares conduzcan a un acuerdo entre las dos compañías son altamente prematuras a estas alturas".

De momento, los inversores castigaron ayer suavemente a Telefónica, que cedió un 0,6% en Bolsa hasta 17,04 euros. En cambio, Telecom Italia subió un 2,45% y Pirelli se disparó un 6,98%.