El PSE intenta que el nuevo IRPF alavés aplique retenciones a las cesantías que reciben los altos cargos
El PSE ha presentado una enmienda para que el nuevo IRPF alavés -que se debate hoy en las Juntas Generales de Álava- considere a las cesantías que reciben los altos cargos del Gobierno y las diputaciones cuando abandonan el cargo como unas retribuciones normales y, por lo tanto, tengan que ser declaradas y se les practique las retenciones que corresponda. Ahora están exentas de tributación.
Las cesantías son consideradas como una especie de indemnización. En un principio, las instituciones las establecieron con el argumento de la inexistencia de un seguro de desempleo para las personas que se dedican a la política institucional una vez que dejan el cargo. Sin embargo, lo cierto es que es que las indemnizaciones se abonan aunque los beneficiarios pasen inmediatamente al puesto que tenían anteriormente o a otro nuevo. La mayor parte vuelve a trabajar en la empresa privada o en las propias administraciones vascas.
En el caso de salir la enmienda adelante, el IRPF alavés se desmarcaría del vizcaíno y guipuzcoano, que fue aprobado hace un mes y donde las cesantías siguen libres de tributación. La peculiaridad es que es en Álava donde se practica la retención a todos los altos cargos del Gobierno vasco, ya que la sede de esta institución se encuentra en Vitoria. El Tribunal Vasco de Cuentas se ha pronunciado varias veces a favor de aplicar la retención del IRPF a las cesantías. "Deben considerarse retribuciones y recibir el mismo trato fiscal que el resto", asegura en todos sus informes de fiscalización de las cuentas de las diputaciones.
La Ley de Cesantías se modificó en 1989 en todas las administraciones vascas tras una polémica sobre las elevadas retribuciones que percibían los políticos que abandonaban los altos cargos. Hasta ese momento, se cobraba un mínimo de tres a seis meses de salario en función de los años trabajados; con el cambio de la normativa, sólo perciben una mensualidad, sin tener en cuenta los años que se ha estado en el cargo.
El importe imprevisto para cesantías de altos cargos en la Diputación de Álava para 2007 es de 170.000 euros.
