El Gobierno garantiza la campaña de la fresa con jornaleros polacos y marroquíes

El subdelegado del Gobierno en Huelva, Manuel Bago, aseguró ayer que la campaña de la fresa de este año está garantizada a pesar de que el Gobierno de Rumania haya impedido la llegada a la provincia de 7.000 de los 10.000 recolectores acordados. Bago afirmó que el aumento de los cupos de trabajadores, en especial de los provenientes de Marruecos y de Polonia -ya integrada en la Unión Europea, por lo que sus trabajadores pueden ser contratados libremente-, solventará el déficit ocasionado por la falta de mano de obra rumana. Otros países de los que se pueden aumentar el número de trabajadores contratados en origen son Bulgaria y Ucrania.

Los agricultores han calculado que este año necesitarán unas 30.000 personas para recoger la cosecha fresera. A pesar del mensaje optimista, asociaciones agrarias como COAG siguieron mostrándose ayer preocupadas por el éxito de la campaña.

La clave radica, según el subdelegado del Gobierno, en los trabajadores polacos y marroquíes. Bago recordó que, en la anterior campaña, más de 8.000 jornaleros polacos fueron contratados. "En las previsiones que hemos hecho este año, no hemos contado con estos trabajadores, porque pueden ser contratados libremente, no en origen, pero ahí están. Y se pueden contratar", afirmó, sin especificar el número exacto de personas de este país que podrían venir para la campaña en curso. El otro pilar para salvar la falta de mano de obra lo ve el subdelegado en los trabajadores marroquíes. "Este año podrían venir unos 5.000", señaló Bago.

El alcalde de Cartaya (Huelva), Juan Antonio Millán (PSOE), afirmó ayer que en Marruecos "se han ido mejorando y concretando notablemente los procedimientos para la selección de los trabajadores". Esta selección en origen "resultará todo un éxito no sólo en cuanto al número de trabajadores, sino también en cuanto al perfil de los seleccionados. Fundamentalmente pretendemos que cumplan el compromiso de retorno que conlleva el modelo de contratación en origen, reduciendo así el número de fugas", según Millán.

Manuel Bago advirtió de que no se tolerará la contratación de inmigrantes indocumentados por parte de los agricultores y recordó que la vigilancia de la Guardia Civil en este sentido será estricta. Esta advertencia va dirigida, sobre todo, a los trabajadores subsaharianos, cuyos países nunca han contado con convenios con las autoridades españolas para contratar en origen a sus ciudadanos. No obstante, Bago reconoció que el futuro pasa por las contrataciones de este tipo en países de África, "porque los países europeos van siendo asimilados por la UE y tendrán libre circulación y contratación". Ya existe una experiencia piloto de contratación de trabajadores en origen con Senegal.