"Pensé que iban a matarme", dice el testigo secuestrado en Argentina
Facundo Flores, uno de los fiscales que investigan el caso del testigo Luis Gerez, que estuvo 48 horas desaparecido, confirmó ayer en declaraciones a la prensa que el albañil de 51 años "fue secuestrado", aunque aún no se encontró el sitio donde lo mantuvieron cautivo. "Tenemos acreditado que estuvo privado de su libertad", dijo Flores al salir de la fiscalía de Escobar, y explicó que "no se notaron signos que evidencien que eso [su secuestro] no fue así".
Flores consideró que es "primordial encontrar el lugar de cautiverio". Otro de los fiscales del caso, Andrea Palacios, confirmó que Gerez había sido torturado con quemaduras de cigarrillos, según le informaron los médicos que examinaron al testigo. Gerez apareció en la noche del viernes 29 de diciembre, después de permanecer 48 horas secuestrado, en la localidad de Garín. Su testimonio en la Cámara de Diputados fue vital para evitar que el ex comisario Luis Patti, acusado de violaciones a los derechos humanos durante la dictadura militar que se extendió de 1966 a 1973, asumiera el año pasado su banca de legislador.
"Yo pensé que me iban a matar", confesó Gerez. El testigo, albañil y militante peronista afín al presidente argentino, Néstor Kirchner, dio detalles de las heridas sufridas en el reciente secuestro en entrevistas publicadas ayer por Clarín y Página/12. "Las quemaduras en el pecho no me las hice yo", dijo en alusión a las heridas con cigarrillo que constató el informe médico de la justicia. También explicó las lastimaduras que tiene en las muñecas y los tobillos: "Se encargaron de atarme en un lugar con unos hierros y unos candaditos".
Víctima de la dictadura
Gerez, de 51 años, relató cómo se inició el secuestro que tuvo en vilo a la política argentina entre el miércoles y el viernes últimos, y que continúa generando polémica por las dudas sobre su final. "En un momento de descuido en la calle (en Escobar, 59 kilómetros al norte de Buenos Aires), siento un coche atrás de mí. Después siento que me agarran del pelo bruscamente y me paralizo. Alguien me arrastró hacia la parte de atrás y me decía: Dormí, dormí".
Lo condujeron a una habitación, lo dejaron atado y encapuchado, pero le permitían descubrirse los ojos cuando los captores no estaban. No vio a nadie, pero dice que podría reconocer la voz de alguno de los secuestradores, así como identificó en su momento a Patti.
A las 17.00 del viernes, el ministro de Seguridad bonaerense, León Arslanián, vaticinó que el caso iba a terminar con un final feliz. Tres horas y media más tarde, Kirchner, habló por todos los canales de televisión para acusar a "elementos paramilitares y parapoliciales" que buscarían amedrentar testigos de las causas sobre violaciones de los derechos humanos en los años 70. Media hora después del discurso de Kirchner, el estatal Canal 7 anunció la liberación de Gerez.
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