Fotogramas clandestinos
Recuperan una película sobre el campo gallego rodada furtivamente en los 70 con la colaboración de Beiras y Luís Seoane
Un catedrático universitario de Santiago de Compostela explica a la cámara el desarrollo del capitalismo en Galicia. Las letras sobreimpresas le ponen nombre: "José Manuel Beiras, catedrático de Económicas". La película, clandestina, se titula El campo para el hombre y la firma, en 1973, el Colectivo de Cine de Clase. La profesora Margarita Ledo Andión ha rescatado la obra, que ya fue exhibida en la apertura de los actos que conmemoran los 15 años de la Facultad de Ciencias de la Comunicación de Santiago.
"Me llamó la atención, sobre todo, lo pipiolo que era", asegura Xosé Manuel Beiras al verse en la pantalla 33 años más tarde. El profesor no recordaba el documental. "Cuando Margarita Ledo lo proyectó en la facultad, si me di cuenta", continúa Beiras, "pero aquello fue un acto más en el barullo de aquel tiempo". Los contactos se establecían en la clandestinidad, y a Beiras, por aquel entonces también secretario general del Partido Socialista Galego (PSG), le falla la memoria. "Supongo que los autores entraron en contacto conmigo a través del Movimiento Socialista de Catalunya, de Joan Raventós, o del PSUC", explica el ahora dirigente del BNG.
Un investigador de la USC es el primero en enfrentarse a la obra de Lumbreras y Lisa
"Fue Luís Seoane quien nos puso en contacto con Beiras", recuerda Lisa
Detrás del Colectivo de Cine de Clase se encontraban Helena Lumbreras y Mariano Lisa. Lisa, en la actualidad profesor de Filosofía en un instituto de Hospitalet del Llobregat, relata cómo llegaron hasta el catedrático Beiras. "Luís Seoane y un argentino, Sofóvich, cuñado de Ramón Gómez de la Serna y comunista, nos dieron el paso a Beiras", desvela. El campo para el hombre expone, en menos de una hora, los dos extremos de la propiedad agraria en la España de los años 70. Entre el minifundio gallego y el latifundio andaluz, la película se muestra abiertamente crítica con la situación del campesinado.
"Cuando llegamos en tren a Galicia", recuerda Mariano Lisa, "lo primero que vimos desde el vagón fue un hombre tirando del arado en un campo; ni siquiera tenían animales". Después de rodar la primera mitad de El campo para el hombre, Lisa y Lumbreras no volverían al noroeste peninsular como cineastas.
"La película, que yo sepa, no se difundió en Galicia", asegura Lisa, "a no ser a través de la Central del Curt". La Central del Curt fue una distribuidora alternativa de cine que funcionó desde Cataluña para todo el territorio estatal durante los años 70. En su catálogo figuraban más de 100 películas, que abarcaban del cine militante a la vanguardia experimental.
Uno de sus fundadores, Martí Rom, indica que el filme de Lumbreras y Lisa El campo para el hombre se encontraba entre los más solicitados de la Central. "En Barcelona, donde vivíamos, éramos nosotros mismos quienes la llevábamos a ateneos y centros sociales", cuenta Mariano Lisa, "pero el filme se vio en Cataluña y en otras partes de España gracias a la Central del Curt".
El Colectivo Cine de Clase se autofinanciaba. "Cuando hicimos El campo para el hombre, Helena estaba en el paro y sólo trabajaba yo", rememora Lisa. En el origen del proyecto El campo para el hombre había una idea más ambiciosa: contar la situación global del campo español, con voces de expertos y de campesinos. "Pero no encontramos más financiación que mi empleo en la enseñanza, así que decidimos incluir sólo los dos extremos, Galicia y Andalucía", comenta. La opinión de los expertos quedó reducida a las entrevistas, en aquel momento ya grabadas, la de Xosé Manuel Beiras y la del experto en latifundios Pascual Carrión.
La obra de Helena Lumbreras y Mariano Lisa se reencontró con los espectadores en la Muestra Internacional de Films de Mujeres de Barcelona, en junio de 2005. Sus cinco películas salieron por fin de la oscuridad en la que habían quedado sepultadas después de la restauración democrática. Para el cineasta catalán e integrante, durante algún tiempo, del Colectivo Cine de Clase, Llorenç Soler, "el cine de Helena y Mariano, al servicio de las clases trabajadoras, era absolutamente inédito en España; existía un cine crítico o social, pero no un cine militante de ese voltaje".
La profesora Margarita Ledo, que recuperó El campo para el hombre y probablemente la proyectó por primera vez en Galicia el pasado mes, habla de un "cine pobre, pero urgente y necesario". Ledo, también autora de documentales, dirige la investigación de Xan Gómez Viñas sobre la cinematográfía de Helena Lumbreras y Mariano Lisa. Estudiante de tercer ciclo de la Universidad de Santiago, el trabajo de Gómez Viñas resultará pionero en España.
La cámara roja
El peso cinematográfico del Colectivo Cine de Clase recaía en Helena Lumbreras. Nacida en Cuenca en 1934, emigró a Italia. El interés por el cine la empujó al Centro de Cinematografía Experimental de Roma, donde conoció a personajes como Pier Paolo Pasolini o el teórico del neorrealismo Cesare Zavatini. Rabiosa militante de la izquierda antifranquista, regresó a España para realizar la película Espagna 68, sobre la situación de las luchas democráticas en la dictadura.
Además de El campo para el hombre, Lumbreras filmó junto a su compañero Mariano Lisa otras tres películas. La prensa franquista, los pactos de la Moncloa o las huelgas obreras del cinturón de Barcelona se encontraban en el objetivo de la cámara de la pareja.
Durante los años 80, alejada del medio cinematográfico, Helena Lumbreras se dedicó a la pintura de caballete. Murió en 1995. Según la fotógrafo Ana Turbau, colaboradora del Colectivo Cine de Clase, la condición de mujer de Lumbreras no hizo más que ponerle obstáculos en el camino. "Pero era una persona de carácter", afirma.
La televisión pública catalana emitió El campo para el hombre dentro de la serie Crònica d'una mirada hace dos años. Crònica d'una mirada recogió los testimonios cinematográficos del antifranquismo catalán entre los años 1960 y 1975. En colaboración con la edición catalana de Le Monde Diplomatique, TV3 publicó todos los capítulos en formato DVD.
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