El bipartito amplía la privatización del servicio de bomberos iniciada por Fraga

El Gobierno gallego privatizará en 2007 la gestión de seis parques de bomberos. La Xunta participa en consorcios -junto a diputaciones y ayuntamientos- que en los últimos años han entregado la gestión de 15 parques comarcales a empresas sin experiencia anterior en la extinción de fuegos. BNG y PSdeG anunciaron en la oposición que revocarían el modelo de gestión privada diseñado por el anterior ejecutivo del PP. En los próximas semanas saldrá a concurso bajo la misma fórmula la gestión del parque de O Porriño. Galicia es la única comunidad que externalizó su servicio de bomberos.

La lucha contra los incendios, las inundaciones y la excarcelación de heridos en accidentes de tráfico son tareas que corresponden en las villas medias gallegas a cuatro empresas privadas procedentes de sectores que nada tienen que ver con la seguridad y las emergencias. La externalización de los bomberos, que no se da en ninguna otra comunidad española, comenzó en 2004, cuando la anterior Xunta del PP firmó convenios con ayuntamientos y diputaciones para formar consorcios que dotasen de servicios de bomberos a los municipios de menos de 20.000 habitantes (los que superan ese censo están obligados por ley a contar con su propio parque).

La fórmula no sería distinta a la que emplean otras instituciones españolas, si no fuese porque que el Gobierno gallego y las diputaciones provinciales de Pontevedra, Ourense y A Coruña decidieron dejar la gestión del servicio de emergencias en manos de una consultora medioambiental, una carrocera de vehículos y una sociedad vinculada a la gestión de residuos urbanos. Desde entonces, Veycar SL, Natutecnia y la unión temporal de empresas que engloba a Celta Prix e Invercon SL tienen la responsabilidad de atender todas las emergencias que se produzcan en sus territorios (la mayor parte de la provincia de A Coruña, las comarcas del Salnés, Morrazo y el sur de Ourense).

Según el conselleiro de Presidencia, José Luis Méndez Romeu, "la rectificación del modelo es una decisión que deben tomar los distintos consorcios", donde la participación del Gobierno gallego es mayoritaria.

Los bomberos de los 16 parques privados repartidos por las tres provincias -Lugo, de momento, no cuenta con ninguna instalación- se han quejado con insistencia de sus condiciones laborales. Hace un par de semanas, varios de ellos resultaron heridos por una carga de la policía nacional cuando reclamaban frente a la Diputación de A Coruña un nuevo convenio. Exigían que sus condiciones se parezcan en algo a las de los bomberos funcionarios, con los que suelen coincidir de incendio en incendio. De momento, son muy distintas.

Los 120 agentes de los parques gestionados por Veycar SL (Ordes, Arteixo, Boiro, Carballo, Arzúa, Boiro y Ribeira) cobran poco más de 800 euros al mes frente a los 1.500 que percibe un bombero de Santiago, A Coruña o Vigo. Y todavía deben ahorrar para pagarse de su bolsillo las 200 horas de formación que reciben en una academia de Asturias. Algo parecido sucede en los parques del Salnés, gestionados por Celta Prix y Xacia Invercon. Cada agente percibe 900 euros mensuales (pagas extraordinarias incluidas). Y eso que el año que termina ha sido especialmente duro para las cuadrillas de Ribadumia y Vilagarcía. Entre los incendios del verano y las últimas inundaciones realizaron 380 salidas.

A la Plataforma de Bomberos de Galicia le preocupa la precariedad, pero advierte de que la externalización del servicio de emergencias conlleva problemas mucho más graves. Su presidente, Carlos Rey, asegura que muchas brigadas no cuentan con el número de efectivos exigidos por los protocolos de intervención.

Sucede en el parque de Boiro, que cuenta con 18 agentes. "Los turnos son de tres o cuatro personas, cuando una situación de emergencia exige al menos cinco o seis efectivos", explica el bombero Pablo Cortés. "¿Cómo realizar una excarcelación entre tres agentes? Olvidando las normas de seguridad", reconoce. El portavoz de la Plataforma lamenta que el bipartito no haya reformado el modelo diseñado por el PP. Carlos Rey recuerda que tanto el PSdeG como el Bloque prometieron revertir la externalización cuando llegasen al poder.

El anteproyecto de Ley de Emergencias aprobado ayer por el Consello de la Xunta destina 50 millones de euros para rebajar a 20 minutos el tiempo de respuesta de los bomberos en todo el territorio gallego. En los presupuestos de 2007, el Gobierno ha incluido partidas de dos millones de euros para cofinanciar la construcción de seis nuevas instalaciones durante el año próximo.

Méndez Romeu, explica que cuando la ley entre en vigor la Xunta asumirá la formación de todas las brigadas. Pero no hay indicios de que el Ejecutivo autónomo vaya a modificar el sistema heredado del gobierno anterior. El bipartito, que financia al 50% el servicio, mantiene la externalización en los 15 parques que ya operan en toda la comunidad. El de Xinzo de Limia, en fase de creación, se ha adjudicado también a Veicar SL y en las próximas semanas se abrirá el concurso para gestionar el de o Porriño. Como el resto también será privado.