Detenidas tres personas por la muerte de un ciudadano kosovar
La Guardia Civil detuvo entre el viernes y la madrugada de ayer a tres individuos de distintas nacionalidades a quienes hace responsables de la muerte, el pasado jueves, de un ciudadano kosovar en una céntrica calle de Vila-seca (Tarragonès). La víctima, que falleció en el hospital Joan XXIII horas después de haber sido alcanzado por tiros de pistola, y los detenidos habían mantenido una pelea horas antes del tiroteo, que la policía atribuye a un ajuste de cuentas.
A los detenidos, Antonio G., ciudadano italiano de 39 años; Jan V., ciudadano checo de la misma edad, y Osman B, nacido en la ex Yugoslavia y de 34 años, los agentes les encontraron munición que podría corresponder con la utilizada en el tiroteo que terminó con la vida de la víctima: F. S., de 30 años. Igualmente, a Osman B. la policía le confiscó un revólver de calibre 38 especial al que le faltaban dos cartuchos.
Los vecinos de la calle de Amadeu Vives de Vila-seca fueron los que avisaron a la Guardia Civil al haber oído algo que parecía "la detonación de una arma de fuego", informó ayer la Subdelegación del Gobierno en Tarragona, que indicó también que junto al cuerpo del herido, al que hallaron tumbado en el suelo, encontraron una pistola.
Las mismas fuentes consideran probable que la víctima no tuviera tiempo de usar esa pistola contra sus agresores. De acuerdo con la versión policial, los tres detenidos habían mantenido una "fuerte discusión" con su víctima momentos antes del tiroteo. Fuentes de la investigación apuntaron que el fallecido tenía antecedentes penales y que el grupo con el que se enfrentó está especializado en robar dinero en efectivo de empresas de polígonos industriales y supermercados de la zona de Tarragona. Ese grupo de delincuentes también ha sido relacionado por la policía con el tráfico de drogas y no descarta que el enfrentamiento que acabó con la muerte del ciudadano kosovar tenga su origen en un asunto de drogas.
La Guardia Civil de Tortosa (Baix Ebre) también está investigando la muerte de un vecino de Amposta (Montsià) de 32 años, Abdesselam El Rhali, ciudadano marroquí, que apareció sin vida a la altura de Deltebre en el margen izquierdo del río Ebro. La Guardia Civil señala que el cuerpo del fallecido presentaba una herida causada por una arma de fuego. La policía judicial de la Guardia Civil de Tortosa se hizo cargo de la investigación sin exponer ningún tipo de hipótesis acerca del móvil del asesinato.
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