El mosquito 'tigre' ya se ha extendido en una veintena de municipios del área metropolitana

El mosquito tigre (aedes albopictus), un insecto procedente del sureste asiático cuyas picaduras son especialmente dolorosas, ha llegado a una veintena de localidades del cinturón de Barcelona. Esta especie llegó a Cataluña por causas desconocidas en verano de 2004, y las primeras muestras se localizaron en Sant Cugat del Vallès y Cerdanyola. Durante estos últimos años, se ha extendido al Vallès Occidental, Baix Llobregat, Barcelonès y Garraf, explicó ayer el biólogo Roger Eritja, del servicio de control de mosquitos del Consejo Comarcal del Baix Llobregat, uno de los pocos centros públicos especializados en esta materia.

En las próximas semanas, el Departamento de Medio Ambiente dará a conocer el listado completo de municipios de la provincia de Barcelona donde se ha detectado el mosquito tigre. De momento, se descarta que haya extendido por las provincias de Tarragona, Lleida y Girona, aunque en el año pasado se detectaron estos insectos en Altafulla (Tarragonès).

La previsión de los expertos es que, tarde o temprano, el mosquito tigre se extienda por Cataluña y por el resto de comunidades autónomas. Lo indicaron ayer diferentes especialistas que participaron en un acto en la sede del Colegio de Periodistas de Cataluña en Barcelona. "El mosquito tigre no tiene necesidad de moverse, pero puede desplazarse a través de los vehículos", precisó Eritja.

Preferencia por los neumáticos

Los neumáticos almacenados en el exterior son uno de los hábitats predilectos del mosquito tigre. Están hechos de caucho, un material no transpirable. Tras llover, el agua estancada facilita la reproducción de esta especie. Precisamente, una de las causas que explica por qué se ha expandido en los países occidentales es el comercio de neumáticos que han llegado a Estados Unidos y a Europa por grandes buques de mercancías.

Otros de los focos de mosquito tigre son cementerios y jardines, ya que depositan sus huevos en cubos y otros recipientes donde se acumule agua estancada. Eritja recomendó a las personas que vivan en casas con jardín o que cuenten con una terraza con plantas que procuren vaciar los depósitos donde haya agua estancada una vez por semana. En caso contrario, la presencia de esta especie está asegurada, concluyó.

Los expertos reconocieron que la llegada de esta especie al área metropolitana ha generado cierta alarma social. Tomàs Montalvo, de la Agencia de Salud Pública de Barcelona, explicó que 6 de cada 10 quejas que se han recibido por la presencia del mosquito tigre eran falsos avisos. Eritja recordó que las picadas son especialmente dolorosas durante el primer año tras su llegada. "En los siguientes años, los efectos disminuyen porque el cuerpo adquiere memoria inmunológica", indicó.