Panamá entra en el Consejo de Seguridad tras el pacto de los países latinoamericanos

La Asamblea General de Naciones Unidas designó ayer formalmente a Panamá para ocupar el puesto que dejará vacante este año Argentina en el Consejo de Seguridad durante el bienio 2007-2008. Italia, Bélgica, Suráfrica e Indonesia también entrarán en el órgano de la ONU el próximo 1 de enero, en sustitución de Dinamarca, Grecia, Tanzania y Japón.

La votación fue un puro trámite, después de que la semana pasada Venezuela y Guatemala se vieran obligadas a renunciar a sus aspiraciones y propusieran al país centroamericano como candidato de consenso para romper con el bloqueo que sufría el proceso de designación, tras 47 rondas de votaciones en las que ninguno de los dos países consiguió la mayoría de dos tercios necesaria.

El grupo de países de América Latina y Caribe dio su bendición unánime al pacto el pasado viernes. La Asamblea General refrendó ayer esta solución oficialmente con 164 votos a favor y 9 abstenciones. Un arreglo similar al que se recurrió en 1979, cuando Cuba y Colombia se disputaban uno de los dos asientos reservados a los países latinoamericanos, que recayó finalmente en México tras 154 rondas.

Perú es el otro país latinoamericano que ocupa un asiento en el Consejo. Su mandato expira a final del año próximo. Algunos países del grupo regional piden ya que se aproveche la experiencia del agrio choque entre Venezuela y Guatemala, para introducir nuevas reglas en el proceso de selección, que eviten una polarización como la registrada durante las cuatro últimas semanas.

EE UU apoyó desde el primer momento la candidatura guatemalteca para evitar que Caracas se hiciera con el puesto. El embajador venezolano ante la ONU, Francisco Arias, dijo ayer que este resultado no hay que verlo en términos de ganadores y vencidos, y que el desenlace muestra que la Asamblea General no acepta imposiciones de los grandes países.