Crece el apoyo a seis argelinos encarcelados por supuesta posesión de armas químicas
Seis ciudadanos argelinos residentes en Banyoles, Olot y Barcelona, encarcelados en aplicación de la Ley Antiterrorista, serán juzgados a partir del lunes en la Audiencia Nacional por posesión de armas químicas y pertenencia a una célula terrorista árabe. En los días previos al juicio, en el que el fiscal reclamará penas de hasta 22 años de cárcel, crece el apoyo de colectivos e instituciones a los acusados. En las decenas de manifiestos y mociones municipales aprobados en los últimos meses se recogen las tesis de su defensa: no hay pruebas de vinculación terrorista y las supuestas armas químicas halladas en casa de los detenidos eran detergente en polvo, silicona para sellar lavabos y disolventes. Por ello, al grupo de argelinos se le conoce como comando Dixan.
Entre las entidades e instituciones que reclaman la absolución se encuentran el Ayuntamiento de Girona, el Colegio de Abogados de Barcelona, UGT, ERC, ICV, Justícia i Pau y personas como el jugador del Fútbol Club Barcelona Oleguer Presas, que participó el jueves en un acto público en favor del comando Dixan. Oleguer aseguró que el caso se ha politizado y se ha utilizado para "dar una falsa sensación de seguridad a los ciudadanos".
Lluïsa Domingo, del Colegio de Abogados de Barcelona, advirtió de que en la instrucción se han vulnerado toda clase de derechos. Enric Pardo, concejal de Girona por ICV, insistió en que la ciudadanía y los vecinos de los acusados comparten la percepción de que "todo ha sido un montaje".
El abogado Sebastià Salellas recuerda que sus defendidos fueron detenidos en el invierno del 2003, pero que al cabo de unos meses, ante la percepción de que la operación había sido un fiasco, el caso se archivó por falta de pruebas. No obstante, "y sin ningún dato nuevo", subraya el letrado, algunos de los implicados en esa operación fueron detenidos de nuevo acusados de estar en disposición de fabricar "napalm casero".
