Crece el pesimismo de los consumidores vascos al mermar la capacidad de ahorro familiar
El pesimismo de los consumidores vascos se está consolidando en unos números negativos de los que no ha salido desde junio de 2001. El índice sintético de confianza de los consumidores que elabora la Federación de Cajas de Ahorros Vasco Navarras retrocedió tres puntos en el tercer trimestre de 2006, y se sitúa en un promedio de -6.
Se trata del valor más desfavorable desde comienzos de 2005, debido sobre todo a la progresiva disminución de la capacidad de ahorro de las familias vascas. El elevado endeudamiento, la subida de los precios del dinero, y la escasa perspectiva de mejoras salariales han creado un estado de opinión desfavorable respecto de las grandes compras. Las expectativas de ahorro de los hogares han caído de un +13 a un +2, y sobre la evolución del desempleo, los encuestados también tienen una mala imagen.
Las previsiones para invertir en la primera vivienda, en la segunda o en un coche, han disminuido con relación al segundo trimestre de 2006. Y es especialmente llamativo el descenso en la expectativa reconocida por los hogares con relación a la adquisición de un vehículo en el próximo año, acorde con el retroceso en el ritmo de la matriculación
Hasta setiembre la matriculación de vehículos ha caído un 8,5%, respecto al mismo periodo del pasado año.
Pese a este deterioro del índice de los consumidores vascos, el resultado obtenido es todavía mejor que el registrado en el conjunto de España (-13) y cercano al obtenido en la zona euro (-7), pero en todos los casos negativo.
La mitad en Internet
En cuanto a los datos referidos a la dotación de los hogares vascos en tecnologías de la información y de la comunicación, estos siguen dentro de la tendencia de suave ascenso en lo que al grado de penetración de los ordenadores e Internet se refiere.
En concreto, en el tercer trimestre de 2006 la proporción de hogares con ordenador alcanza un 64,2% del total, mientras que el grado de penetración de Internet se sitúa en un 51,8%. El trimestre anterior, estos porcentajes se cifraron en un 63,1% y un 50,4%, respectivamente.
Teniendo en cuenta las expectativas de adquisición de este tipo de equipamientos informáticos, en los hogares que aún no disponen de ellos, se observa que en un plazo de doce meses la pro-porción de hogares con ordenador podría crecer cinco puntos hasta elevarse el 69%.
Por lo que se refiere a las expectativas de acceso a Internet, parece que el ritmo de adquisición de este servicio será más acentuado, hasta el punto de crecer en tan sólo doce meses quince puntos. Según las intenciones mostradas por los consumidores cabe esperar un grado de penetración del 65% dentro de un año, con lo que todos los hogares con ordenador tendrían también Internet.
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