Los Presupuestos entran en campaña

El debate de los Presupuestos Generales del Estado para 2007 ha contaminado como nunca la campaña electoral de las autonómicas catalanas del 1 de noviembre. Por primera vez, las cuentas debían recoger lo estipulado en el nuevo Estatuto, es decir, que la inversión del Estado en Cataluña no podía ser inferior al peso económico de la comunidad respecto al conjunto de España: un 18,8%. Convergència i Unió (CiU) y Esquerra Republicana (ERC) presentaron sendas enmiendas a la totalidad, que se votarán mañana en el Congreso de los Diputados, al entender que la inversión real queda muy lejos de este porcentaje. Cinco grupos (los dos catalanes y PP, PNV y EA), que suman 174 diputados, han enmendado los Presupuestos, lo que ha puesto en jaque al Gobierno porque carece de suficientes votos para aprobarlos y porque las enmiendas se votan conjuntamente.

La formación de Mas intentará evitar alinearse con el PP en la votación del Congreso

¿Qué harán finalmente CiU y ERC? Los nacionalistas de Josep Antoni Duran -presidente del grupo de CiU- querían poner al Gobierno de Zapatero contra las cuerdas. Y lo han conseguido de momento. Pero no hasta el extremo de que deba retirar los Presupuestos, circunstancia equiparable, según sus diputados, a una moción de censura. Si mañana el PSOE no dispone de suficientes apoyos, CiU podría dar marcha atrás a sus pretensiones.

CiU lo tiene muy difícil haga lo que haga. Votar a favor de las enmiendas le supondría alinearse con el PP y colmar de munición dialéctica a los socialistas catalanes, en especial a José Montilla, que insiste en un pacto poselectoral entre el centro derecha catalán. Pero ésta parece la opción más plausible porque, como las enmiendas se votan a la vez, también obligaría a los republicanos a hacerse la foto con los populares.

Si, por el contrario, CiU retirase la enmienda en el último momento, daría un balón de oxígeno al Gobierno, pero quizá a cambio de nada. Los socialistas catalanes han presionado al PSOE para que los nacionalistas de Duran y Artur Mas no consigan sacar ningún rédito político de los Presupuestos. No obstante, aseguran desde CiU, tarde o temprano el Gobierno y el PSOE acabarían por agradecer este gesto. "En política, los favores, más en época electoral, acaban por devolverse o por cobrarse", advierte un destacado dirigente nacionalista. Sin embargo, retirar la enmienda dejaría a ERC sola en defensa de los intereses catalanes en Madrid.

Los republicanos, por su parte, no están por la labor de echar un cable al Gobierno. No votaron el nuevo Estatuto, y ahora, como los Presupuestos no recogen, a su juicio, lo estipulado en esta ley, pues tampoco se ven en la obligación de votarlos. Además, es la formación que menos pierde políticamente oponiéndose a las cuentas del Estado para 2007.

El PSOE asume que no cuenta con CiU y ERC, y por eso presiona a PNV e IU-ICV, informa Carlos E. Cué. Si el PNV, con siete diputados, cambia de idea, los Presupuestos están salvados. Y el PSE podrá apoyar las cuentas vascas como contrapartida.

Ayer hubo un contacto entre el Gobierno y el PNV, según fuentes nacionalistas, que podría abrir la puerta para alcanzar hoy un pacto sobre el cupo vasco. Eso permitiría la retirada de su enmienda a la totalidad. IU, también presionada por el PSOE, que le ha ofrecido mover 100 millones de euros para políticas sociales y ecológicas reclamadas por ellos, ha convocado hoy a su dirección para plantear un posible cambio de voto, de la abstención anunciada a un apoyo al PSOE para rechazar las enmiendas.