La paridad electoral y en las empresas es "intocable", afirma el ministro Caldera

"No rebajaremos la cuota electoral, ni los planes de igualdad, ni la presencia paritaria en los consejos de administración". Esas cuestiones, incluidas en el proyecto de Ley de Igualdad entre Mujeres y Hombres, son "intocables", aseguró ayer el ministro de Trabajo y Asuntos Sociales, Jesús Caldera, al presentar el texto ante la Comisión Mixta para los Derechos de la Mujer. Caldera defendió las medidas de "acción positiva", previstas para eliminar la discriminación de las mujeres, y la ampliación del permiso de paternidad de dos a ocho días. El PP fue el único que arremetió contra la norma.

Tras señalar que la futura ley persigue "la igualdad tanto en los ámbitos públicos como privados",

el ministro defendió la paridad electoral prevista (ningún sexo tendrá menos del 40% de las candidaturas) como una "condición para lograr una participación democrática más efectiva".

Sobre las medidas laborales, Caldera señaló que los convenios podrán incluir la preferencia en la contratación y promoción de las mujeres, a igualdad de méritos, donde estén poco representadas. Respecto a la obligación de negociar (no de alcanzar) planes de igualdad en las empresas con más de 250 empleados (les dará ventajas en la contratación pública), aseguró que si pasados cuatro años los avances fueran insuficientes "habrá medidas más duras". En cuanto a la paridad en los consejos de administración (40% de mujeres en ocho años), Caldera afirmó: "No pedimos a las empresas que abandonen criterios de mérito, capacidad o eficiencia, sino que los apliquen a fondo, sin ser enturbiados por razones como el sexo de las personas". Con ello, "mejorará la productividad de las empresas".

La portavoz del PP, Susana Camarero, que sostuvo un rifirrafe con el ministro, criticó la paridad electoral, "que no debe ser impuesta", y las medidas laborales, cuyo rechazo por los empresarios puede provocar la "ineficacia" de la ley. La responsable de Política Social del PP, Ana Pastor, afirmó en otro ámbito que la paridad electoral y en los consejos "no es un problema real de la gente, sino de las élites", informa Europa Press. Desde ERC, Rosa Bonàs pidió más presupuesto para favorecer la conciliación. Inmaculada Loroño (grupo vasco), calificó la ley de "adecuada" y la socialista Mariví Monteserín la elogió. IU pide permiso de paternidad de cuatro semanas.