Alerta en 12 comunidades ante la llegada del ciclón Gordon a la Península
En Galicia se prevén hoy vientos de 130 kilómetros por hora y olas de nueve metros
Doce comunidades, así como el organismo Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA), fueron puestas ayer en alerta por la Dirección General de Protección Civil ante la llegada de los restos del huracán Gordon a la Península, en forma de tormenta tropical. Galicia será la primera en sufrir los efectos del temporal. Las cuatro provincias están en alerta roja ante la previsión de vientos de hasta 130 kilómetros por hora y olas de nueve metros. La Xunta ha suspendido la actividad escolar y ha colocado cientos de kilómetros de barreras vegetales en la pendiente de la costa atlántica para tratar de impedir que las cenizas que dejaron los incendios forestales en agosto lleguen al mar.
El encuentro del huracán Gordon con una borrasca atlántica ha potenciado los efectos del ciclón, según el Instituto Nacional de Meteorología. El temporal dejará fuertes vientos y abundantes precipitaciones, que se prolongarán hasta mañana. Ante esta situación, la Dirección General de Protección Civil ha alertado a las comunidades de Galicia, Asturias, Cantabria, el País Vasco, La Rioja, Navarra, Aragón, Madrid, Andalucía, Extremadura, Castilla y León y Castilla-La Mancha, y al organismo Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (AENA). En Asturias, los vientos pueden alcanzar los 110 kilómetros por hora; 90 en Cantabria, La Rioja, Navarra, Aragón, Andalucía y Castilla y León. En Madrid, Extremadura y Castilla-La Mancha, se prevén precipitaciones de entre 30 y 60 litros por metro cuadrado en 12 horas.
La primera comunidad en la que Gordon se ha hecho notar ha sido Galicia, cuyas cuatro provincias se encuentran en alerta roja. La Xunta decidió, como "medida preventiva", suspender hoy la actividad escolar en todos los niveles educativos, después de que el Instituto Nacional de Meteorología informase de que en esa comunidad se prevén vientos de hasta 130 kilómetros por hora y lluvias intensas. "Estamos ante un fenómeno extraordinariamente poco frecuente, que puede producir situaciones de peligro y que, por tanto, obliga a tomar todas las precauciones", declaró el consejero de Presidencia de la Xunta, José Luis Méndez Romeu, responsable del dispositivo de protección civil de la comunidad.
La alerta por Gordon pilló a los gallegos disfrutando de los últimos días del verano, con temperaturas incluso más elevadas de lo que es habitual en esta época. La catarata de advertencias sobre la magnitud del temporal llevó a instituciones como el Ayuntamiento de Santiago a pedir "calma y tranquilidad" a la población y a rebajar el alarmismo.
Las autoridades compostelanas aseguraron que en la capital de la comunidad la previsión es que el viento no supere los 50 kilómetros por hora y que el temporal "no sea especialmente virulento".
Uno de los principales motivos de preocupación de las autoridades gallegas es que las fuertes lluvias arrastren a los ríos o al mar las cenizas acumuladas en los montes por la oleada de incendios forestales del pasado agosto. La Consejería de Medio Rural de la Xunta ya había ordenado hace un mes el levantamiento de barreras con materia vegetal para tratar de contener posibles aludes cuando llegasen las lluvias.
Fuentes de ese departamento admitieron que no se trabajaba con la previsión de que hubiese un temporal tan pronto, aunque explicaron que las labores realizadas hasta ahora contribuirán a "minimizar los daños". Las barreras son muros levantados con restos de materia vegetal que se diseminan a modo de terrazas por las laderas de los montes. La Xunta también había tomado medidas para tratar de paliar la inevitable erosión de los suelos calcinados que se producirá en cuanto lleguen lluvias torrenciales como las que podría traer consigo el Gordon.
La flota pesquera permanecerá amarrada a puerto. En zonas como la Costa da Morte se teme que los vientos alcancen velocidades de hasta 130 kilómetros por hora y que haya olas de nueve metros, en alta mar, mientras en aguas costeras las olas alcanzarán los cuatro metros. Está previsto que el aeropuerto de Santiago refuerce su personal y que los de A Coruña y Vigo mantengan un retén de bomberos, coordinación y personal de mantenimiento en las horas en las que estos aeropuertos están cerrados al tráfico. AENA recomendó a los tres aeropuertos gallegos que tomen medidas como la sujeción de elementos móviles o el traslado de contenedores.
El Departamento vasco de Interior alertó sobre la posibilidad de que se registren hoy en Euskadi fuertes rachas de viento, que podrían alcanzar los 100 kilómetros por hora en el litoral y los 120 kilómetros en zonas altas de montaña. Los lugares no expuestos podrán soportar vientos con velocidades de unos 80 kilómetros por hora. La Dirección de Atención de Emergencias del Gobierno vasco ha avisado a los servicios de emergencia y los ayuntamientos para que tomen las medidas que consideren oportunas.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.